París denuncia un "sistema de represión institucionalizado" de China contra los uigures

El ministro francés de Relaciones Exteriores, Jean-Yves Le Drian, denunció un "sistema de represión institucionalizado" de China contra los musulmanes uigures en Xinjiang (noroeste), en una intervención el miércoles ante el Consejo de Derechos Humanos de la ONU.

"De la región china de Xinjiang nos llegan testimonios y documentos concordantes que muestran prácticas injustificables contra los uigures y un sistema de vigilancia y represión institucionalizado a gran escala", dijo Le Drian por videoconferencia.

La embajada de China en Francia no tardó en responder en un tuit --sin citar directamente a Le Drian-- en el cual deploró "la injerencia en los asuntos internos de otros bajo el pretexto de los Derechos Humanos".

"China se opone al uso del doble rasero para atacar y denigrar a otros países", recalcó la embajada en su cuenta de Twitter.

Las autoridades chinas, cada vez más señaladas por los occidentales por la situación en Xinjiang, elogiaron el lunes el desarrollo socio-económico en esta provincia y la citaron como un "brillante ejemplo" en sus avances en materia de derechos humanos.

Según estudios de institutos estadounidenses y australianos, al menos un millón de uigures han sido internados en "campos" en Xinjiang y algunos han sido sometidos a "trabajos forzados" o "esterilizaciones forzadas".

China niega categóricamente las dos últimas acusaciones y afirma que los "campos" son "centros de formación profesional" destinados a mantener a la población alejada del extremismo religioso y el separatismo, tras los numerosos ataques mortales contra civiles perpetrados por uigures.

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