Trece hábitos poco saludables que hay que dejar antes de los 40 años

Realizar chequeos médicos, dejar el cigarrillo y el alcohol, tener una actividad física regular; controlar la dieta y la sal; y beber mucha agua deben empezar ¡ahora! para los que ya cumplieron 39

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Expertos aseguran que cambiando algunos hábitos, se puede retardar el envejecimiento Shutterstock 162
Expertos aseguran que cambiando algunos hábitos, se puede retardar el envejecimiento Shutterstock 162

Lucir y sentirse joven a los 40 es posible. Sin embargo, es el momento de empezar el cambio porque los 'errores de salud y estilo de vida' pueden sorprender en la mediana edad dando lugar a enfermedades crónicas.

Estos son algunos de los errores más comunes y cómo revertirlos, según expertos.

-Ser adicto al teléfono móvil: ¿Pueden enfermar a las personas? Un estudio de 2011 de la Universidad de Harvard asoció las altas horas frente al televisor con un mayor riesgo de diabetes tipo 2, enfermedades cardiovasculares y mortalidad por cualquier causa. Recientemente, los investigadores de Brigham y el Hospital de Mujeres de Boston encontraron que la luz azul, que emiten las tablets, teléfonos celulares, e-readers y otros dispositivos altera los ritmos circadianos naturales del cuerpo, por lo que es más difícil conciliar un buen descanso.

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"Estamos creando una generación de la conducta sedentaria que no era natural, por ejemplo, hasta hace 20 años. Por eso, se sugiere caminar 10 minutos por cada hora que se esté frente a la pantalla", dijo a la revista Time la psicóloga del deporte Heather A. Provino.

-No darle prioridad al sueño: Al igual que un teléfono celular, el cuerpo y el cerebro necesitan tiempo para reiniciar y recargar. Los adultos de entre 18 y 64 años requieren alrededor de 7 a 9 horas de sueño por noche. Escatimar horas, puede derivar en un aumento en el riesgo de hipertensión, derrame cerebral y obesidad. También puede ser un factor de depresión, y hay evidencia científica que privarse del sueño promueve el envejecimiento biológico, luciendo más años de los reales.

Expertos en sueño aconsejan antes de ir a la cama, no usar teléfonos celulares y crear una rutina para relajarse.

-Saltarse las comidas: Mucha gente aún considera que hacer ayuno durante varias horas ayuda a bajar de peso. Eso no es correcto y es probable que luego, se coma en exceso o el cuerpo demande comida chatarra más tarde. Con el tiempo, las comidas que faltan pueden dañar al metabolismo, preparándolo para la diabetes tipo 2. Casi dos tercios de los adultos con diabetes diagnosticadas tienen entre 40 y 64 años.

La doctora Katharine Taber, ginecóloga certificada y directora del Centro de Salud de la Mujer de LifeBridge Salud, con sede en Baltimore, instó a los pacientes a empezar el día con un desayuno saludable. "Ayuda a la pérdida de peso, le da más energía al cuerpo y concentración durante toda la jornada".

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-Fumar un cigarrillo (o dos): Una advertencia para los "tramposos del tabaco". Aún en bajas dosis, la persona es fumadora y eso eleva el riesgo de enfermedades del corazón, cáncer de pulmón y otras complicaciones. Dejando el hábito del cigarrillo antes de los 40, se reducirá drásticamente el riesgo de muerte prematura por enfermedades relacionadas con el tabaco en un 90% y hacerlo entre los 40 y los 50 equivaldrá a dos tercios.

-Comer demasiado sodio: El sodio tiene una manera sigilosa de colarse en las dietas de las personas, incluso cuando no están inclinando el salero en sus platos. Está en el pan, las carnes procesadas, sopas, quesos, salsas y aderezos, entre otros alimentos básicos. La mayoría de las personas consume más sodio que el que su cuerpo necesita. La máxima diaria recomendada es aproximadamente la mitad de una cucharita. El exceso puede causar hipertensión, una causa importante de ataque cardíaco y accidente cerebrovascular.

Es por eso que se recomienda leer las etiquetas de los productos cuidadosamente. La Organización Mundial de la Salud (OMS) recomienda que la ingesta diaria no supere los 5 gramos de sal (equivalente a 2 gramos de sodio). Pero en la Argentina, el consumo promedio de sal es de 12 gramos.

-Estar deshidratado todo el tiempo: El agua nutre cada célula y órgano del cuerpo, incluyendo la piel. Es aún más importante mantenerse bien hidratado a medida que se envejece porque los adultos mayores pueden perder parte de su sentido de la sed. Se recomienda tener siempre a mano un vaso de agua y controlar el color de la orina como "signo de alarma".

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-Evitar los lácteos: Las mujeres que eluden lácteos en sus dietas para evitar la hinchazón no estarían haciendo ningún favor a su cuerpo. "La ingesta de calcio entre los 20 y 30 es muy importante para la preservación de la salud de los huesos", dijo la doctora Lisa Larkin, directora del Women's Health Center en la Universidad Cincinnati. "La masa ósea llega a su pico aproximadamente a los 30 años, y comienza a declinar después de eso", agregó.

Además, la experta recomendó para aquellos que no lleguen al consumo ideal por día, la posibilidad de tomar algún suplemento de calcio, brindado por un especialista.

-No tener relaciones sexuales: Con hijos pequeños y obligaciones laborales, el sexo a menudo se hace a un lado en los 30. Pero a medida que los chicos crecen, el sexo debe volver a la lista de prioridades, señaló la doctora Taber. Es por eso que mantener una vida sexual sana, incluso al entrar en la edad media, es una parte importante de la intimidad. "Es más difícil de restituir una vida sexual sana una vez que se haya descuidado", agregó.

Una de las recomendaciones es hablar con el médico si existe alguna incomodidad a la hora de tener relaciones sexuales, ya que hay tratamientos disponibles.

-Tomar el sol: Exponerse directamente al sol o a las camas solares es exponerse a la radiación ultravioleta que envejece prematuramente la piel y en gran medida aumenta el riesgo de cáncer de piel, incluyendo el melanoma, la forma más mortal de la enfermedad. El uso de protector solar y ropa protectora puede ayudar. "No borra los daños del pasado, pero es protectora en el futuro, al igual que dejar de fumar", dijo el doctor Ronald Brancaccio, director del Instituto de la piel de Nueva York y profesor clínico de dermatología de la Facultad de Medicina de la Universidad de Nueva York .

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-Consumo de bebidas azucaradas: Probablemente ya sea conocido que el consumo de gaseosas y otras bebidas azucaradas es una manera segura de sumar kilos. Pero si además se cree que reemplazarlas por bebidas edulcoradas es hacer lo correcto, será un problema. Una investigación sugirió que beber gaseosas light está asociado con el aumento de peso, la resistencia a la insulina y la diabetes. El estudio de la Universidad de Tufts encontró que las mujeres que consumen gaseosas cola light o regular, tienen una menor densidad mineral ósea. "En realidad estás tirando nutrientes fuera del cuerpo", dijo Monique Richard, dueña de Nutrición-In-Sight, en Johnson City, Tennessee.

-Comer demasiados alimentos procesados: Consumir un paquete de papas fritas antes de ir al gimnasio no es la mejor manera de alimentar al cuerpo. Con el tiempo, el azúcar, la grasa y el sodio de que se utiliza para los alimentos procesados tengan un mejor sabor, pueden dañar la salud. Se recomienda sustituir una dieta plagada de comidas de microondas, aperitivos y carnes procesadas con cereales integrales, productos frescos y carnes magras.

-Atracones de alcohol: La mayoría de las personas saben que el consumo en cantidades excesivas de alcohol es tóxico para el cuerpo. "La deshidratación es un proceso que el cuerpo no puede superar rápidamente, en especial, a medida que envejece," dijo Monique Richard. La moderación es la clave: no más de una bebida al día para las mujeres y dos para los hombres.

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-No hacer tiempo para la atención preventiva: Las mujeres en sus 30 años "realmente no toman el tiempo para cuidarse de sí mismas", dijo la doctora Lisa Larkin de la Universidad de Cincinnati. Así entonces, si no se está en control del colesterol, por ejemplo, se podría incrementar el riesgo de enfermedades cardíacas entre los 40 y 50 años. También deben controlar los análisis de rutina como pruebas de Papanicolaou, mamografías y exámenes clínicos para detectar a tiempo enfermedades como el cáncer.