Todo comenzó en 2009 cuando Cory Nieves junto a su familia se mudó de Nueva York a Nueva Jersey y él quiso ayudar a su madre a comprarse un auto vendiendo primero limonada y más tarde chocolate caliente.
De allí en más expandió su cartera de negocios a las galletas dulces. Su cookie de chip de chocolates, que él dice que son "perfectas", ganaron rápidamente popularidad entre sus clientes por sus ingredientes naturales.
Al volver del colegio, Cory y su madre, Lisa Howard, pasan sus días haciendo entregas de sus famosas galletas a empresas como JPMorgan, Porsche, Chase Bank, y el Departamento de Bomberos de Nueva Jersey.
Su familia dice que aprende mejor las matemáticas en el día a día de su negocio, más que en la escuela ya que está involucrado en todos los aspectos de su firma, desde las compras hasta la cocción y la entrega.
El pequeño hombre de negocios, además, es todo un fashionista. A través de su cuenta de Instagram, el 'mini' CEO postea todo sus looks. Para él, "no hay reglas de moda, sólo hay que ser un ejecutivo bien vestido".
Pese a su corta edad, Cory quiere seguir siendo parte del mundo empresarial. De cara al futuro, el pequeño tiene un claro objetivo: "Quiero que mis galletas lleguen al paladar de las personas en todo el mundo".