Masacre de Floresta: recordaron a las víctimas

Familiares y amigos de los tres jóvenes que fueron asesinados por el suboficial retirado Juan de Dios Velaztiqui en una estación de servicio de Floresta en 2001 realizaron el sábado por la tarde una marcha por la zona donde el ex policía cumple la condena con el beneficio de arresto domiciliario.

La movilización comenzó a las 18 del sábado en la esquina de las avenidas Calchaquí y Florencio Varela, de la localidad de Berazategui. En ese lugar, se encuentra la casa de la hija de Velaztiqui.

Cuatro micros, autos particulares y motos con unas 200 personas llegaron hasta el lugar para recordar un nuevo aniversario de los asesinatos que conmovieron a la sociedad argentina.

Silvia Irigaray, madre de Maximiliano Tasca -quien tenía 23 años y fue una de las tres víctimas-, explicó que el objetivo de la marcha era sólo "hacer un alerta y memoria" y no un escrache, por lo que decidieron no señalar ni parar en el domicilio del homicida.

"Es para concientizar a los vecinos de que en el barrio vive un asesino", afirmó Irigaray, y agregó que en los afiches figuran también los teléfonos de la Asociación "Madres del Dolor" para que los vecinos se comuniquen para avisar en caso de que "vean que (el condenado) sale a la calle", violando su prisión domiciliaria.

El triple crimen fue cometido el 29 de diciembre de 2001, cuando Tasca, Cristian Gómez (25), Adrián Matassa (23) y Enrique Díaz se encontraban en el minimercado de la estación de servicio ubicada en la esquina de Bahía Blanca y Avenida Gaona, en Floresta.

En ese contexto, los cuatro amigos miraban por televisión imágenes en las cuales varios manifestantes golpeaban a un policía en Plaza de Mayo, tras un cacerolazo en las horas previas a la renuncia del entonces presidente Adolfo Rodríguez Saá.

Según los testigos del hecho, Tasca pronunció la frase que irritó a Velaztiqui: "Está bien. Esto es por lo que hicieron en la plaza. Por fin le tocó a uno de ellos". Pero en ese momento el ex policía reaccionó y dijo: "Hasta acá. Basta", tras lo cual sacó su arma y tiró contra los muchachos.

El 10 de marzo de 2003 Velaztiqui fue condenado a prisión perpetua, al ser encontrado culpable del delito de triple homicidio calificado agravado por alevosía. Una pena que fue confirmada el 19 de junio del mismo año por la Cámara Nacional de Casación Penal.