"Hoy matan por robar un auto"

"En la época en que fui juez de San Isidro, entre el 85 y el 90, había una gran cantidad de autos mellizos, igual que ahora. Lo que pasa es que este tema volvió a tomar auge porque tienen consecuencias diferentes. No es lo mismo que hace diez años con lo que vemos ahora. En aquel entonces los desarmadores se nutrían de piezas y autos que eran producto de 'levantadores' y en la actualidad esta falta de control y persecución hace que los levantadores no sean los de antes sino que hay gente que está mandada al efecto", dijo en Radio 10 el ex juez federal Alberto Piotti.

"Cuando uno busca un repuesto de un auto y un desarmadero no lo tiene, le dicen a la gente 'espere dos horas' y lo mandan a buscar. La diferencia en cuanto a consecuencias es que antes un levantador iba y se llevaba un auto estacionado. Hoy, por robar un auto se mata", comparó.

"Parece que con esto estuviéramos añorando otros tiempos o pensando que otros tiempos fueron mejores. Hay que dejar en claro que siempre hablamos de actividades delictivas que las autoridades tienen la obligación de perseguir. A veces se mira para otro lado", señaló el ex juez, al tiempo que añadió: "Lo que pasa es que hay lugares que están habilitados, que están sometidos a inspecciones y que se trabaja con la documentación en orden. Pero la mitad de los productos con los que se trabaja están en orden, y la otra mitad no".

Piotti indicó que "no es una red de connivencia que no conduce a una cabeza máxima, como ocurre en otras organizaciones delictivas, como son las de narcotráficos". Aclaró: "En este caso hay negocios aliados. Hay quienes tienen una posición de liderazgo, al ser propietarios de establecimientos legales o ilegales aunque tengan habilitación. Una cosa es estar habilitado y la mitad de productos están en condiciones y la otra mitad no. Esa fachada de legalidad se da muchas veces y eso pasaba antes también".

"Ahora estamos dándole una dimensión diferente al tema, por las consecuencias que conlleva. No me cabe la menor duda de que los hechos delictivos de sangre tienen como origen la demanda, el ánimo de lucro. Es la nota distintiva de la actualidad", resumió Piotti.

"Tampoco me cabe la menor duda de que un intendente, sobre todo en el interior, porque en la provincia de Buenos Aires está en el conurbano, la provincia (de Buenos Aires) interior, y las grandes ciudades, pueda llegar a desconocer las actividades que se llevan a cabo en este tipo de Gobierno. Es imperdonable", dijo el letrado al ser consultado por el caso de Guaminí, cuyo intendente aseguró ayer en Radio 10 que desconocía que en esa localidad se estuvieran llevando este tipo de actividades.

Respecto al tema de la inseguridad en la provincia de Buenos Aires y cómo está siendo organizado por las autoridades a cargo, Piotti destacó: "Cuando (Eduardo) Duhalde fue gobernador de la provincia, durante sus ocho años de Gobierno, tuvo a ocho encargados de seguridad. Y la verdad es que es una temática absolutamente difícil. No es que no sea posible resolverla, pero no es el camino adecuado".

En ese sentido, justificó: "No quiero abrir juicios sobre el actual encargado de la política de seguridad (el ministro Juan Pablo Cafiero). No se acierta con las medidas -deslizó-. Igualmente, sé, porque soy amigo de (Felipe) Solá, que es el principal motivo de preocupación del Gobierno".

"Lo que corresponde es combatir las causas. Me cuesta hablar de este tema, porque yo estuve al frente de la Secretaría de Seguridad y sé que somos todos diagnosticadores. Ahora, cuando tenemos que implementar las soluciones es difícil hacerlo. Algunos creen que puede ser una cuestión presupuestaria. El ejemplo de esto es los presos en las comisarías. Pasaron diez años y seguimos en lo mismo, y el costo de mantener tanta gente en la comisaría sigue aumentando cuando se podría destinar ese dinero a construir centros de detención transitorios", concluyó.