Oda al algodón: Chaco a través de los ojos del diseñador Gustavo Pucheta

Con la provincia de Chaco como su taller y pasarela, el diseñador argentino Gustavo Pucheta trabaja con el algodón, género de su tierra, en el desarrollo de indumentaria experimental. En diálogo con Infobae, presenta su nueva colección, Renacer

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Backstage del desfile de "Renacer", la nueva colección del diseñador Gustavo Pucheta.
Backstage del desfile de "Renacer", la nueva colección del diseñador Gustavo Pucheta.

Situado en un mundo asfixiante y absurdo que pareciera ser la mezcla entre 1984 de George Orwell y El proceso de Franz Kafka, “Brazil”, el film de culto de 1985 dirigido por Terry Gilliam, relata la rebelión y consiguiente decadencia ante el sistema de Sam Lowry, un tecnócrata romántico interpretado por Jonathan Pryce. Una de las primeras escenas de la película, fragmento de un sueño del personaje, lo muestra volando entre las nubes con un par de alas mecánicas, una armadura de oro y plata y un rayo azul que adorna su frente, una especie de Ícaro disfrazado del Aladdin Sane de David Bowie.

Tanto en el mito griego como en la tradición cristiana, ya sea por la caída del hijo de Dédalo o por la intención de visitar al hombre, los seres alados y los ángeles, soldados del ejército de Dios, se aproximaron a la tierra. Como recuerdo de esa visita, etéreos, poderosos, envueltos en capas de blanco “como personas que bajaron del cielo a imponerse, a pelear”, los modelos del diseñador Gustavo Pucheta atraviesan el campo chaqueño con una sastrería subversiva repleta de volúmenes y vacíos, excesos y ausencias. “Salgo de la moldería clásica para hacer otras deformaciones, realizo indumentaria experimental”, comenta en diálogo exclusivo con Infobae.

El diseñador junto a sus modelos en una pasarela natural en pleno campo chaqueño
El diseñador junto a sus modelos en una pasarela natural en pleno campo chaqueño

Este encuentro entre el cielo y la tierra tiene lugar en una geografía específica en el noreste de la República Argentina. Con campos de algodón que se asemejan a nubes y luego se convierten en géneros y extensos yuyales que pasan por pasarelas, “hoy Chaco, mi provincia, se transformó en mi taller”, explica Gustavo. “Mi contacto con nuestro campo viene de mi árbol genealógico”, recuerda el diseñador, “mi madre se crió corriendo entre algodón”. En términos concretos, más del 80% de la producción nacional de esta materia prima proviene de Chaco y de Santiago del Estero. El nexo entre la provincia y el algodón es tan simbólico como real.

Por lo tanto, el suelo y su historia se convierten en escenario y parte de la épica de sus colecciones, signadas por la emoción y por la teatralidad. “Siempre recuerdo que Alexander McQueen decía que si fuiste a uno de sus desfiles y no sentiste algo, entonces no sirvió para nada”, comenta el diseñador, “y a mí se me hace que la vida y el vestir son eso: el drama, el buen drama... aquello que te genera algo”. No es extraño entonces que la Lacrimosa (parte final de la secuencia del Dies irae en la misa de Réquiem) de Mozart, haya signado el el proceso creativo de “Renacer”, su nueva colección, “son unos pocos segundos de goce, eso es lo que trato de generar con mis desfiles”.

Sastrería experimental en la que la confección artesanal y la materia prima son protagonistas
Sastrería experimental en la que la confección artesanal y la materia prima son protagonistas

El renacimiento de la marca a través de la simpleza, “de la pureza de la línea, de una experimentación en la sastrería apoyada en la silueta humana, del uso urbano”, en palabras de Gustavo, tiene lugar tras un largo encierro. Con el recuerdo del aire, del ardiente sol del Chaco y del candor de los campos eternos de algodón en la mente, la mirada se dirige tierra adentro purificándose, volviéndose primaria, elemental. “La mano de obra y el género de algodón, materia prima naciente de nuestro suelo, se apoderan de las prendas”, explica el diseñador, “evocan a una mujer fuerte que renace de los montes chaqueños y va en busca de nuevos caminos”.

Un aire sagrado y nutricio envuelve a estas guerreras como a la Madonna en sus incontables representaciones, atemporal exaltación de la mujer. Cargado de sentido, el trabajo de Gustavo se vuelve testimonio de una moda que emplea el artificio como medio para echar luz sobre las cuestiones del mundo real. “Creo que por la popularidad que tiene el diseño de indumentaria hoy se lo puede usar para dar a conocer ciudades, personas, paisajes, variedades”, sostiene. A través de sus ojos, Chaco brilla bajo un nuevo sol.

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