Luego de más de 150 días, el Gobierno Nacional exceptuó del cumplimiento de la cuarentena a los empleados de hoteles de la Ciudad de Buenos Aires. Si bien la actividad turística sigue restringida por el avance de la pandemia de coronavirus, los establecimientos hoteleros serán habilitados la semana próxima para recibir a personas que viajen desde el interior del país para realizar tratamientos médicos, trámites postergados por la situación epidemiológica o para cumplir con actividades laborales en la Capital Federal.
A través de la Decisión Administrativa 1519/2020, el Poder Ejecutivo exceptuó del “cumplimiento del aislamiento social, preventivo y obligatorio y de la prohibición de circular a las personas afectadas a las actividades y servicios en establecimientos hoteleros y para-hoteleros para permanencia con fines no turísticos y sin uso de los espacios comunes en el ámbito de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires”.
Al igual que en el resto de los permisos, se deben garantizar las medidas de traslado, distanciamiento social e higiene para prevenir contagios de coronavirus y las personas contempladas en dicha decisión deberán tramitar el permiso de circulación.
Esta flexibilización fue solicitada por el Gobierno porteño en el marco de su plan progresivo de reapertura de sies etapas, que anunció un mes atrás Horacio Rodríguez Larreta. En la etapa 2 del mencionado programa, que comenzó esta semana, se incluyó la práctica de deportes individuales y la reapertura de comercios en zonas como Once y la avenida Avellaneda en Flores. En tanto, según comunicó la administración de la Ciudad, a partir del próximo lunes 24 quedará habilitado el funcionamiento de los hoteles “para atender necesidades específicas de alojamiento como un tratamiento médico o para empresas que lo necesitan para sus empleados”.
De acuerdo al protocolo difundido por el Gobierno de Rodríguez Larreta, los establecimientos “tendrán solamente disponibles las habitaciones, sin permitir el uso de áreas comunes como bares, gimnasios, spa y pileta”, en tanto que para poder alojarse, se deberá presentar de manera obligatoria el permiso de circulación.
En efecto, en la Decisión Administrativa publicada este miércoles en el Boletín Oficial, en el marco de las medidas de Distanciamiento y Aislamiento Social, Preventivo y Obligatorio, se remarcó que será la Ciudad de Buenos Aires la que deberá “dictar las reglamentaciones necesarias para el desarrollo de las actividades” que deberá cumplir el personas de los hoteles, “pudiendo el Jefe de Gobierno de la Ciudad implementarlas gradualmente, suspenderlas o reanudarlas, en el marco de su competencia territorial, en forma total o parcial, en virtud de las recomendaciones de la autoridad sanitaria local, y conforme a la situación epidemiológica y sanitaria”.
Cabe mencionar que el sector hotelero fue de los primeros que tuvo que cerrar sus puertas como consecuencia del COVID-19 y muchos consideran un cierre definitivo ante un escenario de incertidumbre y de crisis económica. Primero se enfrentaron a las cancelaciones de reservas que comenzaron en enero desde Europa, continuaron en febrero y terminaron de agravarse en marzo. Con el cierre de fronteras y el turismo prohibido, varios hoteles fueron utilizados para garantizar el aislamiento de pacientes con síntomas leves de coronavirus y para que las personas que fueron repatriadas en los primeros meses de la cuarentena pudieran cumplir con dos semanas de aislamiento preventivo antes de regresar a sus hogares.
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