González Palazzo: "Veo nuestro sistema judicial con preocupación, escepticismo y bastante desilusión"

El juez de la Cámara Nacional de Apelaciones en lo Criminal y Correccional de Capital Federal, el Dr. Mariano González Palazzo, visitó el estudio de InfobaeTv para ser entrevistado por la Dra. Marcela Losardo en el ciclo Justicia Abierta.

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González Palazzo, de vasta trayectoria en el Poder Judicial, o como él dice, "en el crepúsculo" de su carrera, en referencia a la ópera "El ocaso de los dioses", de Richard Wagner, describe las falencias del sistema, pero al mismo tiempo, señala que se están propiciando cambios que permiten un mejor funcionamiento de las instituciones, que hasta entonces se han ido deteriorando.

– La sociedad demanda cada vez más respuestas del Poder Judicial. ¿Estamos mejor o estamos peor?
– Vivo con preocupación, con escepticismo y bastante desilusión. Pero en estos últimos tiempos, tengo la sensación que se están produciendo cambios, un cambio de actitud. Se están propiciando reformas, están empezando a funcionar las instituciones que muchas veces en el transcurso del tiempo se han ido deteriorando. Y esto choca con una intención social muy grande de requerimiento de justicia, de resultados rápidos. De un desencuentro, lo que es el Poder Judicial en sus tribunales y  en sus despachos, con la sociedad que está esperando respuestas que no se logran, que no se obtienen.

– Su fuero tiene mucha relación directa con el poder de policía por los delitos que se cometen.
– Siempre fue un sueño mío que haya una universidad policial. Preparar a nuestros policías con conocimientos universitarios. Esto me ocasionó discusiones con algún jefe de policía, que con la mejor intención del mundo me hacía ver que si él a su personal lo preparaba, les brindaba la posibilidad de una carrera y un título universitario, al corto plazo iba a renunciar y se iba a dedicar a la profesión porque las remuneraciones no guardaban proporción con las entradas que iba a tener en una profesión fuera de la policía. Y además, porque el policía al estar sentado estudiando, perdía contacto con la sociedad y con el delito en la calle, con la comisaría, con el código de procedimiento actual.

– ¿Y la policía judicial? ¿Es un debate permanente?
— Es el sueño del Quijote, sí.

– Hubo muchos intentos.
— Hubo muchos intentos. Actualmente está funcionando la Academia Federal de la Policía Federal, donde no solo obtienen títulos de grado, como abogado, por ejemplo, sino también de criminalística, de criminología, sociología criminal. Creo que nada está más aplaudido que la cultura o la educación a nuestro personal, a nuestra gente. Y esto ya se empieza a observar; tenemos oficiales de policía que están preparados, que tienen todo el conocimiento, aplican en forma correcta las normas y son colaboradores de la justicia.

– Hablando de la independencia judicial y de las presiones ¿Sufrió
presiones en determinados momentos de su vida?
— Sí, por supuesto.

– Cuando usted dice que se sienten apoyados por la Corte Suprema, ¿qué significa esto?
— Esto significa que hay una respuesta inmediata. Yo fui presidente de la Cámara en dos oportunidades y cualquier problema que tenían mis jueces de primera instancia yo lo comunicaba al señor presidente de la Corte Suprema.

– Y siempre hubo respuesta.
— Siempre hubo respuesta. Siempre hubo una comunicación muy buena con la Corte Suprema. Da gusto, porque éste es el respaldo que uno necesita, no solamente la provisión de computadoras, o papel o lo que fuera, sino eso de que está abierta la puerta, porque así no nos sentimos tan solos en un despacho. Como decimos, treinta audiencias por día y teniendo que decidir la suerte de personas que a lo mejor terminan de alguna manera su vida social a través de una condena larga. Esto también es una presión interna.

La entrevista completa: