En vísperas del feriado largo, muchos limeños ya afinan sus planes para dejar atrás la rutina y aprovechar unos días de descanso sin alejarse demasiado de la ciudad. La proximidad de diversos paisajes —desde costa y sierra hasta reservas naturales— convierte a Lima en un punto de partida estratégico para escapadas breves, ideales para quienes buscan desconexión inmediata.
Este año, el calendario ofrece una doble oportunidad. El 8 de diciembre, Día de la Inmaculada Concepción, y el 9 de diciembre, feriado nacional por la Batalla de Ayacucho según lo establecido por la Ley 31381, conforman un fin de semana perfecto para explorar. Aquí te presentamos algunas de las alternativas más recomendadas y lo que encontrarás en cada una.
Naturaleza y aventura a pocas horas de Lima
Lunahuaná (a 183 km – 3,5 a 4 horas): Este valle cañetano es uno de los favoritos para quienes buscan emociones fuertes. El canotaje en el río Cañete, el canopy y el ciclismo de montaña destacan entre sus actividades principales. También es posible recorrer bodegas artesanales para conocer la producción local de vinos y piscos.
San Mateo de Otao (a 95 km – 2,5 a 3 horas): Ubicado en la sierra de Lima, ofrece un escenario ideal para rappel y caminatas. Su atractivo más conocido es la cascada Cinco Cerros, rodeada de piscinas naturales perfectas para un descanso entre montañas.
Songos y Guanano (a 75 km – 2 a 2,5 horas): Estos parajes de Huarochirí destacan por sus toboganes naturales de piedra, pozas y pequeñas cataratas. Son una excelente opción para quienes quieren combinar aventura con paisajes rurales.
Lomas de Lachay (a 105 km – 2 horas): Este espacio de conservación en Huaura brinda rutas de caminatas, zonas de observación de aves y una singular vegetación que cambia según la temporada, convirtiéndolo en un destino ideal para los amantes de la fotografía.
Marcahuasi (a 118 km – 4 horas hasta San Pedro de Casta + trekking): El altiplano de Marcahuasi es célebre por sus formaciones pétreas con siluetas humanas y animales. Es un destino perfecto para quienes disfrutan del trekking y el camping a gran altura.
Rutas para conocer historia y cultura
Rúpac (a 145 km – 4 horas): Conocido como el “Machu Picchu Limeño”, este complejo arqueológico en Huaral fascina por su arquitectura preincaica y sus vistas panorámicas. Es ideal para caminatas exigentes y fotografía paisajística.
Caral (a 182 km – 4 horas): La Ciudad Sagrada de Caral, en Barranca, permite adentrarse en una de las civilizaciones más antiguas del continente. Sus pirámides y plazas ofrecen un recorrido histórico único.
Pachacámac (a 40 km – 1 hora): Este santuario prehispánico combina un importante legado arqueológico con un moderno museo de sitio, lo que lo convierte en una alternativa accesible para una salida corta.
Chancay (a 78 km – 1,5 horas): Además del emblemático castillo, la zona ofrece playas, un malecón renovado y una oferta gastronómica centrada en pescados y mariscos.
Callao Monumental (a 15 km del Centro de Lima): Esta zona cultural se ha convertido en un punto clave para el arte urbano. Alberga galerías, murales, restaurantes y permite visitar el Real Felipe y el Museo Naval del Perú.
Destinos ideales para relajarse
Churín (a 207 km – 5 a 6 horas): Famoso por sus aguas termales, es un destino perfecto para quienes buscan descanso profundo. Sus pozas minerales ofrecen un ambiente propicio para aliviar tensiones y disfrutar del clima serrano.
Azpitia (a 80 km – 2,5 horas): Conocido como el “Balcón del Cielo”, este apacible valle destaca por su vista privilegiada hacia el río Mala y sus restaurantes campestres, ideales para desconectarse en un entorno natural.