Vórtice ciclónico de Altos Niveles y su relación con las lluvias en la selva y la sierra: ¿qué es este sistema climático?

¿Sabías que las lluvias intensas en el sur de la selva y sierra peruana son resultado de la presencia del Vórtice Ciclónico de Altos Niveles? Este fenómeno atmosférico se caracteriza por ser un sistema de baja presión que opera en la alta atmósfera.

Su presencia en la región sur del Perú es un indicador climático importante que contribuye a la comprensión de las variaciones meteorológicas, especialmente en áreas que incluyen distintos puntos en la selva y sierra, donde las comunidades enfrentan los efectos directos de estas lluvias en términos de inundaciones y daños a la infraestructura.

Por ello, la comprensión y el estudio del Vórtice Ciclónico es crucial para la planificación y respuesta ante desastres en el país.

De acuerdo a Rosario Julca, experta en meteorología del Servicio Nacional de Meteorología e Hidrología (Senamhi), los efectos de este vórtice sobre el clima en Sudamérica se traducen en la circulación de intensos vientos en dirección horaria, a unos 8.000 kilómetros de altura sobre el noreste de Brasil, que juegan un papel crucial en la modulación de las precipitaciones en la región.

Este aspecto es de especial relevancia para la planificación agrícola, la gestión de recursos hídricos y la prevención de desastres naturales causados por inundaciones o sequías.

Por tal razón, según explica Julca a Andina, la comprensión detallada de este patrón atmosférico permite un mejor pronóstico meteorológico y un avance hacia estrategias de mitigación más efectivas frente a los impactos climáticos negativos en el continente.

El Vórtice Ciclónico de Altos Niveles ha generado humedad y lluvias abundantes en zonas donde típicamente no se veían afectadas de esta manera, alterando patrones climáticos establecidos.

Sin embargo, esto no sucede en la costa, por ejemplo. Julca explica que esto se debe a la influencia dominante de otros sistemas atmosféricos como el Anticiclón del Pacífico Sur.

Este último, que predomina en los niveles más bajos de la atmósfera, a unos 5,000 metros de altura, aumenta la nubosidad y afecta principalmente la costa sur y central del país, dejando estas áreas con cielos nublados pero sin causar lluvias.

La presencia del Vórtice Ciclónico de Altos Niveles se espera que persista hasta el 1 de marzo, momento en el cual se anticipa que regrese a su posición normal.

Este retorno provocaría otro periodo de lluvias en la selva, aunque esta vez de forma más dispersa y uniforme en toda el área. Además, no se descarta la posibilidad de otro desplazamiento del vórtice hacia el sur durante el resto del verano, lo que podría significar más lluvias intensas para la selva y sierra sur del país.

Por otro lado, en cuanto a la interacción con otros sistemas meteorológicos, Julca apuntó la coexistencia y relación entre el vórtice y el Alta de Bolivia, una circulación de vientos en niveles altos que favorece las lluvias en verano.

No obstante, este año se espera una disminución en la intensidad del Alta de Bolivia, lo que provocaría el movimiento más al sur del vórtice y un cambio en las precipitaciones en la región.