Joven arriesga su vida por su madre y golpea con un fierro a delincuente armado en Trujillo

Los crímenes en Trujillo han escalado a cifras que son de temer. Las extorsiones, sicariatos y robos al paso parecen ser ‘el pan de cada día’ en esta ciudad perteneciente a la región La Libertad. Los ciudadanos aseguran que se sienten desprotegidos por las autoridades por lo que algunos no dudan en exponer su vida para salvar a los suyos.

Un informe de América Noticias pone en manifiesto la situación. Según evidencia las grabaciones de una cámara de seguridad, un joven se armó de valor y puso su propia vida en riesgo al ver cómo su madre era víctima de robo a mano armada.

Los hechos ocurrieron en la urbanización Santo Dominguito en la ciudad de Trujillo, cuando una pequeña empresaria llegaba a su vivienda a bordo de un taxi color blanco. Cuatro sujetos en mototcicletas venían siguiéndola.

Cuando el vehículo en el que iba la víctima se estacionó en la puerta de ingreso de su casa, dos de los criminales la interceptaron. Uno de ellos la apuntaba con un arma de fuego mientras otro se le acercó para intentar arrebatarle el bolso donde la mujer llevaba una fuerte suma de dinero.

El hijo de la empresaria, al percatarse que su madre estaba en peligro, cogió una vara de fierro y salió rápidamente de su vivienda para golpear por la espalda al delincuente que forcejeaba con su madre.

La grabación muestra cómo el criminal suelta a su víctima luego del golpe recibido. Aunque el delincuente intentó huir y cayó al suelo algo sentido por el impacto de la vara de metal, logró reincorporarse y escapar junto con su cómplice, quien disparó contra el valiente joven. Afortunadamente, el hijo de la empresaria no resultó herido.

Vecinos de la zona aseguran que a diario se registran robos al paso y a mano armada. Lo lamentable es que a pesar de estos hechos, ellos aseguran las autoridades policiales no acuden a la zona a atender estos reportes.

“No sé qué vamos hacer. Uno llama al Serenazgo e igual les da. La Policía no viene, es por demás”, sostuvo una residente de la zona.

La creciente incidencia de secuestros, robos, extorsiones y otros crímenes en Trujillo, una ciudad que antes se destacaba por sus bellezas provinciales apreciadas tanto en Perú como internacionalmente, ha ocasionado un cambio de enfoque. En vista de esta problemática, el 14 de febrero, el gobierno decretó un estado de emergencia en Trujillo y Pataz por 60 días como medida para contrarrestar el aumento de la delincuencia, motivado en gran parte por la minería ilegal.

Rubén Vargas, quien fuera ministro del Interior, comentó que la continuidad en la aplicación del estado de emergencia desde la administración de Ollanta Humala hasta el momento actual evidencia la ausencia de un plan sólido por parte de las sucesivas administraciones para enfrentar los desafíos de inseguridad del país. Vargas critica que el estado de emergencia, más que una solución, ha sido una respuesta superficial que no aborda de manera adecuada la problemática de la inseguridad.

“El estado de emergencia en el Perú, por razones de seguridad, se viene aplicando desde el gobierno de Oriente Humala. Y desde ese periodo de gobierno hasta la fecha ha sido, sin ninguna excepción, un absoluto fracaso”, precisó a Infobae Perú.

Vargas resalta no solo la falta de liderazgo y planeación estratégica en este contexto crítico sino también califica la actual crisis de seguridad como la más severa en la historia del Perú republicano. Los niveles extremos de violencia, marcados por atentados con granadas y asesinatos llevados a cabo por sicarios, subrayan la seriedad del desafío que afronta la nación.

Así, mientras el estado de emergencia se impone como una respuesta inmediata a una situación profundamente arraigada y compleja, también remite a la imperiosa necesidad de desarrollar un enfoque más holístico y a largo plazo, junto con un compromiso político firme para asegurar la seguridad y el bienestar de la población.