Aneurisma aórtico abdominal: causas, síntomas, diagnóstico y tratamiento

Un aneurisma de la aorta abdominal es una región agrandada de la parte baja del vaso principal que suministra sangre a todo el cuerpo (aorta). La aorta se extiende desde el corazón hasta el centro del pecho y el abdomen.

La aorta es el vaso sanguíneo más grande del cuerpo, de manera que una ruptura de un aneurisma de la aorta abdominal puede causar un sangrado potencialmente mortal.

Según el tamaño del aneurisma y cuán rápido crece, el tratamiento varía de observación a cirugía de urgencia.

Síntomas

A menudo, los aneurismas de la aorta abdominal crecen de forma lenta y sin síntomas notables, lo que dificulta su detección. Algunos aneurismas nunca se rompen. Muchos se manifiestan pequeños y permanecen así. Otros crecen con el paso del tiempo, a veces rápidamente.

Si tienes un aneurisma de la aorta abdominal en expansión, podrías notar lo siguiente:

Dolor constante y profundo en el área abdominal o a los lados del estómago (abdomen)

Dolor de espalda

Un pulso cerca del ombligo

Cuándo consultar al médico

Si tienes dolor, especialmente si es repentino y fuerte, busca ayuda médica de inmediato.

Factores de riesgo

Los factores de riesgo del aneurisma de la aorta abdominal son los siguientes:

Consumo de tabaco. Fumar es el mayor factor de riesgo de aneurismas aórticos. Fumar puede debilitar las paredes de la aorta, lo que aumenta el riesgo de sufrir un aneurisma aórtico y la ruptura del aneurisma. Cuanto más tiempo fumes o mastiques tabaco, más posibilidades tendrás de presentar un aneurisma aórtico. Los médicos recomiendan hacer una ecografía abdominal una sola vez para detectar aneurismas de la aorta abdominal en hombres de entre 65 y 75 años que fuman o fueron fumadores.

Edad. Los aneurismas de la aorta abdominal se producen con mayor frecuencia en personas de más de 65 años.

Ser hombre. Los hombres padecen aneurismas de la aorta abdominal con mucha mayor frecuencia que las mujeres.

Ser de raza blanca. Las personas de raza blanca tienen un riesgo más alto de padecer aneurismas de la aorta abdominal.

Antecedentes familiares. Tener antecedentes familiares de aneurismas de la aorta abdominal aumenta el riesgo de padecer la afección.

Otros aneurismas. Tener un aneurisma en otro vaso sanguíneo grande, como la arteria de detrás de la rodilla o la aorta en el tórax (aneurisma de la aorta torácica), puede aumentar el riesgo de desarrollar un aneurisma de la aorta abdominal.

Si estás en riesgo de padecer un aneurisma de la aorta, el médico podría recomendarte que adoptes medidas adicionales, como medicamentos para disminuir la presión arterial y para aliviar la tensión en las arterias debilitadas.

Diagnóstico

Los aneurismas de la aorta abdominal generalmente se detectan cuando se hace un examen físico por otro motivo o durante los exámenes médicos de rutina, como una ecografía del corazón o el abdomen.

Para diagnosticar un aneurisma de aorta abdominal, el médico te examinará y revisará tus antecedentes médicos y familiares. Si tu médico piensa que puedes tener un aneurisma de la aorta, se hacen pruebas por imágenes para confirmar el diagnóstico.

Las pruebas para diagnosticar un aneurisma de aorta abdominal incluyen las siguientes:

Ecografía abdominal. Este es el tipo de prueba más común para diagnosticar aneurismas de la aorta abdominal. Una ecografía abdominal es una prueba indolora que utiliza ondas sonoras para mostrar cómo fluye la sangre hacia las estructuras en el área abdominal, incluida la aorta. Durante una ecografía abdominal, un técnico presiona suavemente una varita de ultrasonido (transductor) contra el área abdominal y lo mueve de un lado para otro. El dispositivo envía señales a una computadora, que crea imágenes.

Tomografía computarizada del abdomen. Esta prueba indolora utiliza rayos X para crear imágenes trasversales de las estructuras en el interior del área abdominal. Se utiliza para crear imágenes claras de la aorta. Una tomografía computarizada del abdomen también puede detectar el tamaño y la forma de un aneurisma. Durante una tomografía computarizada , te recuestas en una camilla que se desliza hacia el interior de una máquina con forma circular. A veces se aplica tinte (medio de contraste) a través de una vena para que los vasos sanguíneos se vean con más claridad en las imágenes.

IRM abdominal. Esta prueba por imágenes utiliza un campo magnético y ondas de radio generadas por computadora para crear imágenes detalladas de las estructuras en el interior del área abdominal. A veces se aplica tinte (medio de contraste) a través de una vena para que los vasos sanguíneos sean más visibles.

Exámenes de detección de aneurismas de la aorta abdominal

El hecho de ser hombre y el hábito de fumar aumentan considerablemente el riesgo de aneurisma de la aorta abdominal. Las recomendaciones de los exámenes de detección varían, pero en general son los siguientes:

Los hombres de 65 a 75 años que alguna vez fumaron cigarrillos deben someterse a un único exámen de detección mediante una ecografía abdominal.

Para los hombres de 65 a 75 años que nunca fumaron, el médico decidirá si existe la necesidad de hacer una ecografía abdominal según otros factores de riesgo, como antecedentes familiares de aneurisma.

No existe suficiente evidencia para determinar si el examen de detección de aneurisma de la aorta abdominal sería provechoso para las mujeres de 65 a 75 años que fumaron cigarrillos o que tienen antecedentes familiares de este tipo de aneurisma. Pregúntale al médico si es necesario que te sometas a un examen de detección mediante ecografía según tus factores de riesgo. Las mujeres que nunca fumaron generalmente no necesitan someterse a un examen de detección de esta enfermedad.

Tratamiento

El objetivo del tratamiento del aneurisma de la aorta abdominal es prevenir la rotura del aneurisma. El tratamiento puede incluir el control cuidadoso o la cirugía. El tratamiento que recibas dependerá del tamaño del aneurisma de la aorta y de lo rápido que crezca.

Control médico

El médico podría recomendarte esta opción, que a menudo se la llama conducta expectante, si tu aneurisma de la aorta abdominal es pequeño y no provoca síntomas. El control requiere revisiones con el médico y pruebas por imágenes periódicas para determinar si el aneurisma crece y controlar otras afecciones, como la presión arterial alta, que pueden empeorarlo.

Por lo general, una persona que tiene un aneurisma aórtico abdominal pequeño y sin síntomas debe hacerse una ecografía abdominal al menos seis meses después del diagnóstico y en las citas de seguimiento regulares.

Cirugía y otros procedimientos

Por lo general, la cirugía para reparar un aneurisma de la aorta abdominal se recomienda cuando el aneurisma mide entre 1,9 y 2,2 pulgadas (aproximadamente entre 4,8 y 5,6 centímetros) o más, o si crece rápidamente.

Además, el médico podría recomendarte esta cirugía de reparación si presentas síntomas como dolor de estómago o si tienes un aneurisma con fuga, sensibilidad o dolor.

El tipo de cirugía que necesites depende del tamaño y la ubicación del aneurisma, tu edad y tu estado general de salud. Las opciones de cirugía del aneurisma de la aorta abdominal pueden comprender las siguientes:

Reparación endovascular. Este es el procedimiento que se usa con mayor frecuencia para reparar un aneurisma aórtico abdominal. El cirujano introduce un tubo fino y flexible (catéter) por una arteria en la pierna y lo guía cuidadosamente hasta la aorta. Un tubo de malla metálica (injerto) en la punta del catéter se coloca en el lugar del aneurisma, se lo expande y se lo fija en el lugar. El injerto refuerza la sección debilitada de la aorta para prevenir la rotura del aneurisma. La cirugía endovascular no es una opción para todas las personas con aneurisma de la aorta abdominal. Tú y tu médico pueden conversar para ver cuál es la mejor opción de reparación para ti. Después de la cirugía endovascular, deberás hacerte pruebas por imágenes regularmente para asegurarte de que no haya pérdidas en la zona del injerto.

Cirugía abdominal abierta. Supone la extirpación de la sección dañada de la aorta y su reemplazo por un injerto, que se cose en el lugar. La recuperación total podría tardar un mes o más.

Las tasas de supervivencia a largo plazo son similares tanto para la cirugía endovascular como para la cirugía abierta.