¿La literatura es cosa de hombres? Los debates más trascendentes son aquellos en los que, antes que perseguir respuestas definitivas, se busca avanzar a través de preguntas provocadoras. Así fue el diálogo público que mantuvieron la periodista y editora Tamara Tenenbaun —autora del reciente poemario Reconocimiento del terreno, publicado por la editorial independiente Pánico el pánico— y Eleonor Faur, doctora en Ciencias Sociales, que escribió junto a Alejandro Grimson el libro Mitomanías de los sexos (Siglo XXI) en el stand de Leamos en la Feria del Libro (pabellón amarillo, stand 1722).
¿Es cierto que pocas mujeres logran publicar? Un relevamiento por los catálogos de las editoriales argentinas demostró que el número de títulos escritos por mujeres respecto del de varones es muy inferior. Salvo algunos poquísimos casos en que araña el 40%, en general no más del 20% de los libros de los sellos analizados pertenecen a escritoras.
"Es algo muy extraño", dijo Tenenbaum, "ya que toda la gente que trabaja en la industria sabe que son las mujeres quienes más compran libros". Y continuó: "Los dos nombres literarios argentinos más exitosos hoy son, indiscutiblemente, Samanta Schweblin y Mariana Enriquez. Son buenísimas. En realidad, las mujeres que llegan son todas buenísimas, pero ¿por qué no podemos llegar las 'más o menos', como les pasa a los varones? Si se les pregunta a las editoriales, algunas van a poner la razón en los lectores, pero los lectores reaccionan muy bien y compran libros de mujeres".
¿El universo femenino es poco interesante? Faur recuperó el clásico El segundo sexo de Simone de Beauvoir para señalar que todavía hay una jerarquización de los mundos masculino y femenino: "Cuando los hombres hablan de fútbol, autos y rutas no le dicen boylit. Lo femenino está puesto en un segundo lugar, está a la sombra de lo masculino. Pero estas son construcciones realizadas por hombres, que eran los que tenían la palabra, los que accedían a las universidades, los que armaban el discurso y las sensibilidades de la época".
¿Por qué destacan tanto las poetas? Grandes nombres de la poesía argentina son femeninos: desde Alejandra Pizarnik hasta Diana Bellessi, pasando por Irene Gruss, Tamara Kamenszain, Beatriz Vignoli, Olga Orozco, Mirta Rosemberg, tantísimas otras.
Para Tenenbaum, la razón por la que las mujeres triunfan en la poesía es "porque la poesía ha quedado un poco al margen del mercado —en términos de plata, quiero decir— y quizá sea por eso que las mujeres fuimos naturalmente terminando ahí". Tenenbaum destacó a las referentes de la "poesía de los noventa", como Fernanda Laguna, Cecilia Pavón, Marina Mariasch. "Es interesante lo que hicieron, jugando con el estereotipo de la 'boluda'. Un poema de Marina Mariasch decía que como había leído que la naranja te hacía crecer el pelo, tomaba mucha Fanta. Me parece subversivo eso, pero es lo que siempre hicimos las mujeres: tomar lo que dicen de nosotras, reapropiárnoslo y tirárselo al otro a la cara".
Antes del cierre, destacaron las miradas de María Moreno en Black Out y de las novelas de Selva Almada. Los interrogantes, por supuesto, no se agotan aquí: es un ejercicio saludable seguir planteándolos.
Las actividades de hoy en el stand de Leamos
18.00: Entrevista a Patricia Kolesnicov: la autora y periodista habla de sus libros Biografía de mi cáncer y No es amor, recientemente publicados por IndieLibros.
19.30: La pelota no se mancha… de tinta. Los periodistas Luciano Olivera (Pastillas y caramelos) y Andrés Burgo (El partido) y un recorrido por los mejores libros de fútbol.
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