El turista español, "atrevido y curioso" y con gusto por Oriente Medio y Latinoamérica

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Esther Gómez

Marbella (Málaga), 26 may (EFE).- El español es un viajero “atrevido y curioso” al que le gusta mucho Oriente Medio y Latinoamérica y, aunque se ha incorporado tarde al mundo del viaje internacional, es considerado “un viajero muy interesante”, según Maribel Rodríguez, vicepresidenta del Consejo Mundial de Viajes y Turismo (WTTC, por sus siglas en inglés).

“Le gusta mucho el sol y la playa y conoce perfectamente las islas del Caribe”, pero como en España tiene a su alcance este tipo de destino, cuando sale fuera le gusta es vivir experiencias y conocer otras culturas o la gastronomía", añade.

“Hoy te vas a cualquier parte del mundo y siempre hay un español”, señala Rodríguez en una entrevista con EFE.

Este afán por conocer lugares exóticos y vivir experiencias únicas -a veces arriesgadas- llevó hasta Etiopía al fotógrafo y guía turístico español Toni Espadas, que fue asesinado el pasado 20 de mayo en un tiroteo mientras acompañaba a un equipo de la televisión chilena.

También hace apenas una semana, tres turistas españoles perdieron la vida y una mujer resultó herida de gravedad en un atentado del Estado Islámico en Afganistán.

“En España se ha superado la época postcovid con creces” y a nivel mundial a finales de este año “se van a alcanzar datos muy similares a los de 2019” y se conseguirá, asimismo, cierto equilibrio, ha precisado Rodríguez.

El mercado de los viajes y el turismo es un motor para la economía y el empleo, subraya la vicepresidenta del WTTC, que se muestra optimista ante la previsión de acabar el año en torno a un 10,3 por ciento del Producto Interior Bruto (PIB) anual que se tenía en los tiempos prepandemia.

“Es un sector que ha demostrado que, a pesar de todas las dificultades, se ha recuperado con facilidad” y por fin “se están oyendo buenísimas noticias: los hoteleros están contentos y el sector está feliz”, apunta.

Entre 2020 y 2023 el crecimiento que se ha vivido en el turismo y el viaje ha sido enorme y este año se observa la misma tendencia, explica Rodríguez.

Si bien es cierto que se espera que el ritmo se mantenga, no va a ser lo mismo que cuando se parte de una cifra más baja, aclara.

A su juicio, la clave está en no perder la confianza y “seguir trabajando por un turismo sostenible, que no solamente se enfoque en el crecimiento económico -que, por supuesto, es lo más importante para la compañía-, pero que también tenga en cuenta al cliente”.

Un turismo que tenga presente toda la cadena de valor y que sea amable con el ciudadano del enclave que lo acoge, el planeta y el medio ambiente, destaca la vicepresidenta.

La pandemia ha dejado al descubierto una serie de tendencias que ya se venían observando en el turismo y los viajes un tiempo atrás, pero que han terminado de consolidar lo vivido con la covid, los confinamientos y las restricciones a la movilidad, comenta.

“Lo primero que hemos intensificado es que todo el mundo quiere viajar. Independientemente de la situación por la que hayamos pasado, lo primero que hacemos cuando nos recuperamos es salir y viajar”, indica.

“Siempre va a haber un viajero deseoso -indica Maribel Rodríguez- y esa es la gran esperanza para este sector” que, por otro lado, “tiene que entender que tipo de cliente se ha quedado”.

El viajero actual es “un cliente responsable, que busca la experiencia y la autenticidad, y que espera llegar a un lugar y encontrarse con lo que es ese lugar”, explica.

Por ejemplo, si viaja a Marbella quiere sentir que está en Andalucía y en uno de los destinos más glamurosos de cuantos se conoce, y para lograrlo resulta imprescindible “involucrar al local”, sentencia Rodríguez.

Así, más allá de los imprescindibles como el transporte o las comodidades básicas de un hotel, el turista pospandemia es un viajero experiencial al que le interesa saber qué va a obtener del viaje y que este le resulte enriquecedor a distintos niveles como el gastronómico o el cultural.

Actualmente, la tecnología acerca a cualquier país al viajero, que “a golpe de clic puede elegir si viajar a Maldivas o a Baleares, si quedarse en España o ir a México”, subraya.

El reto está en “enamorar” al cliente y para ello hay que realizar una importante “labor de atracción” y mostrarle ese valor añadido que reclama. EFE

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(foto) (vídeo)

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