La portavoz del Partido Popular en el Senado, Alicia García, ha avanzado este lunes que su partido reclamará la comparecencia del exmilitante socialista y exasesor en La Moncloa Francisco Salazar en el marco de la comisión de investigación abierta por el llamado ‘caso Koldo’, después de que varias mujeres hayan presentado denuncias contra él por presuntos delitos de acoso sexual.
Según ha explicado la portavoz popular, su grupo utilizará la mayoría absoluta de la que dispone en la Cámara alta para llamar a Salazar a la comisión que investiga contratos, licencias, concesiones, ayudas y otras operaciones del Gobierno y del sector público relacionadas con la intermediación de Koldo García y otros implicados en la trama de la Operación Delorme.
García ha difundido un vídeo a los medios de comunicación en el que detalla la iniciativa del PP y carga duramente contra el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, a quien acusa de ser el presidente “más dañino” para las mujeres. “Presumió de ser el Gobierno más feminista y decente de la historia, pero está siendo el más corrupto y el más dañino para las mujeres de toda la democracia”, afirma la portavoz en la grabación.
La senadora popular sostiene que Salazar no era un colaborador ajeno al núcleo del poder socialista, sino una persona de “absoluta confianza” del jefe del Ejecutivo. “No era un desconocido para Pedro Sánchez. Era el quinto del Peugeot”, ha reiterado, en alusión al grupo de dirigentes que acompañaron al hoy presidente en su carrera hacia el liderazgo del PSOE.
Acusaciones de comportamientos “intolerables” en Moncloa
El partido que lidera Alberto Núñez Feijóo sostiene que Francisco Salazar se valió de su posición como alto cargo y de su cercanía al presidente del Gobierno para llevar a cabo conductas que califica de “intolerables” hacia mujeres de su entorno profesional en Moncloa. Entre las acusaciones recogidas por el PP se incluyen presiones para que las mujeres vistieran con mayor escote, gestos obscenos, la simulación de felaciones delante de ellas y comentarios sobre su aspecto físico y su vida sexual. Además, la formación sostiene que Salazar habría cobrado en efectivo dinero de procedencia desconocida dentro de la trama investigada.
“Las víctimas no merecen que el sanchismo tape y esconda este escándalo, merecen que se destape la verdad y que los responsables pidan perdón y paguen por ello”, subraya el PP en sus valoraciones públicas.
En relación con la citación a la comisión de investigación, Alicia García sostiene que Salazar “sabe demasiado” sobre las primarias del PSOE en las que se impuso Pedro Sánchez. Según afirma, el exasesor formaba parte del “núcleo duro” de la candidatura, junto a Santos Cerdán, José Luis Ábalos y Koldo García. La portavoz recuerda que, cuando la gestora socialista reclamaba explicaciones sobre la financiación de aquella campaña interna, una de las personas a las que Sánchez remitía para aclarar cualquier cuestión era precisamente Salazar.
La senadora del PP también ha criticado el cese de Antonio Hernández, mano derecha de Salazar en La Moncloa, al considerar que se trata de una destitución “de segunda o de tercera” para intentar, a su juicio, silenciar el escándalo. “Llega muy tarde y se queda muy corta”, ha afirmado. En este contexto, García insiste en que las mujeres “no merecen que un presidente acorralado por la corrupción quiera proteger al acosador Salazar para comprar su silencio”.
Por el momento, el PP no ha puesto fecha concreta a la comparecencia del exasesor en el Senado. La comisión ya tiene varias sesiones fijadas para los próximos días, entre ellas las citaciones de Francisca Muñoz, esposa del exsecretario de Organización del PSOE Santos Cerdán, prevista para el 15 de diciembre, y la del propio Cerdán dos días después.
El papel del PSOE y las denuncias internas
El caso ha tenido también una derivada interna en el PSOE. El presidente del Gobierno asumió el pasado sábado, en conversación informal con periodistas en el Congreso, la “responsabilidad” en “primera persona” de lo ocurrido, calificándolo de “error no premeditado”. Sánchez reconoció así el funcionamiento defectuoso del canal interno antiacoso del partido, después de que se conociera que dos denuncias contra Salazar permanecieron durante cinco meses sin recibir respuesta.
Durante ese periodo, ninguna de las dos denunciantes obtuvo contestación alguna por parte de su partido y, según se ha hecho público, las denuncias llegaron incluso a desaparecer del sistema. El PSOE solo admitió a trámite ambos escritos después de que se acreditara la existencia de las quejas.
La portavoz del PP en el Congreso de los Diputados, Ester Muñoz, también se ha referido a la citación de Salazar en la comisión de investigación del Senado y ha defendido que las mujeres “se merecen respuestas y explicaciones”. “Si Sánchez piensa que puede hacer como si nada con el escándalo de Salazar, lo lleva claro”, ha afirmado.
El PP enmarca esta comparecencia dentro de una estrategia más amplia de utilización de la comisión de investigación del ‘caso Koldo’, por la que ya han pasado más de 90 comparecientes en relación con una amplia amalgama de asuntos que los populares consideran vinculados al entorno del presidente del Gobierno, desde contratos durante la pandemia hasta actuaciones de distintas empresas públicas y operaciones del Ejecutivo.