Por la falta de lluvias, baja el área de siembra de trigo y enfrenta el peor escenario de los últimos 12 años

Se complica el panorama en la actual campaña de trigo, en medio del faltante de gasoil, la ausencia de precipitaciones y la incertidumbre que enfrentan los productores en medio de rumores sobre cambios en las retenciones a las exportaciones del cereal.

Según precisó la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR) en su último informe, el cereal enfrenta el peor escenario de siembra de los últimos 12 años y de esa manera recortó su estimación, la cual baja de 6,35 millones de hectáreas a 6,2 millones de hectáreas, un 10% de caída en relación al ciclo anterior.

Los especialistas de la entidad rosarina, comentaron que actualmente “dominan las circulaciones frías y se espera el regreso de las heladas en los próximos días. ´La Niña´sigue activa y fortaleciéndose, contrariando el comportamiento que suele mostrar en esta época del año. De las últimas tres campañas finas, la actual condición de los perfiles muestra que este ciclo se inicia con las peores condiciones de humedad edáfica”.

Además se destacó que el 80% de la región pampeana se encuentra en una situación seca a muy seca, el centro de la sequía se encuentra en la provincia de Córdoba y San Luis, y comienza a ganar terreno en el NO bonaerense y el centro de Santa Fe. Al respecto, el informe señaló: “En este junio del 2022 la situación de falta de agua es más grave que la del 2020. Para encontrar una situación más ajustada de humedad hay que retroceder a junio de 2009″.

Por otro lado, se detalló que hasta el momento la siembra de trigo está detenida en gran parte de la región pampeana, con un avance de siembra del 17% contra el 30% del año pasado. Si bien el informe no lo detalla, el faltante de gasoil en varias regiones productivas comienza a tener su impacto, según lo vienen advirtiendo los propios productores y contratistas rurales, que se suma a la ausencia de precipitaciones y a la incertidumbre que provoca la situación política y económica del país.

De acuerdo al reporte de la Bolsa de Rosario, en el contexto de ausencia de precipitaciones es la provincia de Córdoba la más afectada por esta situación, con una merma del 30 al 60% del área cultivada, con estimaciones que señalan que de las 1,35 millones de hectáreas sembradas con trigo se sembrarían 950 mil hectáreas. También está complicada Santa Fe, con una caída interanaual de siembra del 9%, Buenos Aires no muestra cambios y se mantiene la baja publicada hace un mes en un 5% menos de área, y Entre Ríos podría ser la única provincia que logre sembrar un 5% más de trigo que en el 2021.

A todo esto, la BCR planteó que con el actual escenario de siembra y si el clima cambia y permite contar con condiciones normales para el desarrollo del cultivo, la cosecha triguera podría alcanzar los 18,5 millones de toneladas, con un rendimiento de 31 quintales por hectárea. “Para buena parte del centro y norte de la región pampeana, entre finales de junio y los primeros diez días de julio se cierra la oportunidad de siembra. Si bien la ventana es más larga, pasarse de esas fechas requiere cambiar de ciclo y de semillas y tener mayores riesgos de enfermedades”, comentaron los especialistas de la entidad.

Y agregaron: “Para muchos la posibilidad de lluvias en los próximos quince días es fundamental para finalmente sembrar o cambiar de cultivo. Los pronósticos de corto plazo indican el ingreso de otro frente de aire frío y seco que provocará un nuevo descenso de las temperaturas y el desarrollo de heladas, alejando la posibilidad de lluvias sobre la región pampeana. Por el momento los modelos probabilísticos muestran que posiblemente deberemos esperar hasta la segunda quincena de junio para recibir algún alivio pluvial y, de ser así, la tendencia continúa favoreciendo al extremo noreste del país”.

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