La extensión indefinida del programa de recepción de billetes estadounidenses antiguos y deteriorados, conocidos como “cara chica”, sumada a la inminente entrada en vigencia de la Ley de Inocencia Fiscal, genera un escenario diferente para quienes poseen dólares fuera del circuito tradicional en la Argentina. El Banco Nación confirmó que aceptará billetes de todas las series, incluso los de diseño antiguo, en igualdad de condiciones una vez que rija la nueva normativa. Esta decisión se vincula directamente con la preocupación por las trabas que podrían imponer los bancos privados al momento de recibir dólares “del colchón”, en un contexto donde las reglas contra la evasión y el lavado de activos mantienen plena vigencia.
El Banco Central (BCRA) modificó en noviembre el mecanismo de recambio de billetes en dólares, dejando sin fecha límite el programa que permite a las entidades financieras recibir depósitos de billetes viejos, deteriorados o manchados. Esta actualización eliminó la restricción que vencía el 31 de diciembre de 2025, lo que habilita a clientes de bancos a continuar llevando dólares “cara chica” y otras series antiguas a ventanilla, sin restricción por antigüedad o estado físico. Desde la publicación de la Comunicación “A” 8352, la recepción de estos billetes quedó autorizada de manera permanente.
El proceso consiste en que los bancos participantes reciben los billetes, verifican su autenticidad y luego los trasladan al BCRA. Posteriormente, el organismo monetario remite los dólares a Estados Unidos para su destrucción y coordina la importación de nuevos ejemplares como reemplazo. El servicio de intermediación no genera costos para los bancos participantes, a diferencia del esquema anterior donde debían recurrir a entidades internacionales privadas.
En paralelo a esta disposición monetaria, el Congreso sancionó al cierre de la semana pasada la Ley de Inocencia Fiscal. Esta otra normativa apunta a facilitar la regularización de activos en dólares que hasta ahora permanecían fuera del sistema financiero formal. No obstante, la ley no entrará en vigencia hasta que el Poder Ejecutivo la promulgue y publique en el Boletín Oficial. El gobierno de Javier Milei y el ministro de Economía, Luis Caputo, esperan que el trámite administrativo concluya en breve.
La sanción de la Ley de Inocencia Fiscal introduce un factor de incertidumbre entre los bancos privados. Fuentes del sector señalaron a Infobae que existe preocupación respecto a la posible negativa de algunas entidades a recibir dólares no declarados, debido a la vigencia de normas antilavado y antievasión. Esta inquietud motivó que el Banco Nación asuma un rol activo en la operatoria, comprometiéndose a aceptar “dólares del colchón” sin objeciones una vez que la ley entre en vigencia. Voceros del banco estatal confirmaron a este medio que la recepción abarcará tanto billetes nuevos como “cara chica”, sin distinción por diseño o antigüedad.
El mecanismo para el recambio de dólares viejos ya funcionaba desde agosto del año pasado, cuando el BCRA lo adoptó como parte de las iniciativas para facilitar la regularización de activos. En ese contexto, quienes poseían dólares no declarados y los incorporaron al programa de exteriorización, pudieron regularizar su situación hasta el 8 de noviembre.
La prórroga indefinida del sistema de recambio beneficia tanto a los bancos como a los usuarios. La eliminación de una fecha límite amplía las posibilidades de participación y simplifica el trámite para quienes poseen dólares fuera de circulación habitual. Además, el esquema reduce los costos y las barreras para entidades bancarias locales, que anteriormente enfrentaban dificultades para gestionar el recambio de billetes directamente con la Reserva Federal.
Las condiciones para cambiar billetes establecen que debe presentarse una superficie superior al 50% de cada billete y que la denominación y las medidas de seguridad sean identificables. Los billetes se cuentan por piezas y se verifica su autenticidad antes del depósito. Aquellos que no están en condiciones de continuar circulando por estar rasgados, sucios, flojos, gastados o desfigurados, se incluyen en los depósitos regulares. No se aceptan billetes mutilados ni subdivisiones internas en los fajos presentados.
Mientras se aguarda la promulgación de la Ley de Inocencia Fiscal, el público se mantiene expectante sobre el funcionamiento concreto del sistema. La decisión del Banco Nación de aceptar dólares de cualquier serie y estado físico, confirmada por voceros al medio, representa una alternativa para quienes buscan ingresar sus dólares al circuito financiero. El objetivo es evitar restricciones que puedan derivar de la aplicación estricta de normas antilavado en la banca privada.
La situación actual combina dos cambios normativos: por un lado, la extensión sin plazo del programa de recambio de billetes “cara chica” y deteriorados; por otro, la inminente entrada en vigencia de una ley que promueve la regularización de activos en dólares. La articulación de ambos elementos plantea un nuevo escenario para la circulación y depósito de dólares en el sistema bancario argentino.