Hombre mató con arma blanca a un habitante de calle mientras dormía: fue condenado a más de 45 años de cárcel

Un juez encontró pruebas suficientes de que Juan Guillermo Gómez Pineda atacó con arma blanca a un habitante de calle mientras dormía

Guardar

Nuevo

El hombre atacó con arma blanca al habitante de calle mientras dormía - crédito Imagen ilustrativa Infobae
El hombre atacó con arma blanca al habitante de calle mientras dormía - crédito Imagen ilustrativa Infobae

Un juez penal de conocimiento dispuso que Juan Guillermo Gómez Pineda fuera condenado a una pena de prisión de 45 años y 10 meses por el homicidio de un habitante de calle en Medellín.

El crimen, ocurrido en la madrugada del 23 de junio de 2022 bajo un puente peatonal cerca de la Plaza Minorista de la ciudad, llevó al juez a declarar a Gómez Pineda culpable de homicidio agravado.

Ahora puede seguirnos en nuestro WhatsApp Channel y en Facebook.

Fachada de la Plaza Minorista, en Medellín - crédito Plaza Minorista José María Villa
Fachada de la Plaza Minorista, en Medellín - crédito Plaza Minorista José María Villa

La sentencia, emitida el 14 de mayo de 2024 en Medellín, subraya la gravedad del acto cometido por Gómez Pineda y otro individuo, quienes atacaron a la víctima, un hombre de 40 años, con armas blancas mientras dormía. La Fiscalía General de la Nación, por medio de un fiscal de la Unidad de Delitos contra la Vida de la Seccional Medellín, presentó pruebas concluyentes que resultaron en esta condena. El sujeto deberá cumplir la pena en establecimiento carcelario.

Curiosamente, al momento de perpetrar este homicidio agravado, Gómez Pineda estaba cumpliendo una condena en prisión domiciliaria por otro crimen. Había sido sentenciado previamente a 16 años y 9 meses por un delito cometido en San Carlos, Antioquia.

Las personas en situación de calle viven en una condición de extrema vulnerabilidad - crédito CUARTOSCURO.COM
Las personas en situación de calle viven en una condición de extrema vulnerabilidad - crédito CUARTOSCURO.COM

El fallo es de primera instancia, lo que implica que aún hay espacio para apelaciones dentro del marco legal colombiano. Sin embargo, este juicio sienta un precedente importante en términos de la severidad de las penas impuestas por crímenes violentos contra individuos desprotegidos y en situación de vulnerabilidad.

La importancia de que las autoridades castiguen a los violentos

La función de las autoridades en la sanción de crímenes violentos en Colombia es crucial para mantener el orden público y garantizar la seguridad ciudadana. La efectividad de estas acciones no solo previene la impunidad, sino que también contribuye a la construcción de un tejido social basado en la justicia y el respeto por los derechos humanos.

En un país marcado por décadas de conflicto interno, el papel de la justicia en la persecución y castigo de estos delitos es fundamental para consolidar la paz y generar confianza en las instituciones estatales. Así, la rigurosidad y prontitud en la actuación de las autoridades frente a los crímenes violentos es esencial para avanzar hacia una sociedad más equitativa y segura.

Un ejemplo de ello es la judicialización de dos integrantes del clan del Golfo por parte de la Fiscalía. Los dos individuos, Cristian Macareo Romero, también conocido como Caballo, y Carlos Alberto Herrera Arcila, alias Camilo, son acusados de estar implicados en asesinatos de líderes sociales en Santander y Antioquia.

Alias Camilo es uno de los judicializados, y  se encuentra en la cárcel desde 2023 por su posible responsabilidad en otros hechos delictivos - crédito Fiscalía General de la Nación
Alias Camilo es uno de los judicializados, y se encuentra en la cárcel desde 2023 por su posible responsabilidad en otros hechos delictivos - crédito Fiscalía General de la Nación

Estas acciones se enmarcan dentro de los esfuerzos por combatir la violencia hacia defensores de derechos humanos y líderes comunitarios en Colombia, reflejando una iniciativa clara por parte de las autoridades para enfrentar la impunidad y proteger a quienes se encuentran en riesgo debido a su labor social.

Las víctimas de estos presuntos crímenes incluyen a Efraín Sánchez Durán, asesinado en Barrancabermeja, Santander, y a Jairo de Jesús Zuleta Álvarez, en Nariño, Antioquia. Caballo está imputado por el homicidio de Sánchez Durán, ejerciendo el rol de sicario para el grupo armado, y enfrenta cargos por homicidio agravado, concierto para delinquir agravado, y posesión ilegal de armas.

Por otro lado, Camilo, acusado de ser el cabecilla de una fracción del Clan del Golfo, está relacionado con el homicidio de Zuleta Álvarez, ejecutado en una incursión violenta en su propiedad.

Las medidas tomadas contra estos sujetos subrayan la dedicación y esfuerzos por parte de la Unidad Especial de Investigación (UEI) para desmontar las estructuras criminales que amenazan y ejecutan ataques en contra de quienes defienden los derechos humanos y lideran iniciativas sociales en el país.

Este proceso no solamente busca resarcir los crímenes cometidos sino también enviar un mensaje contundente contra la violencia y el terror que grupos armados como el Clan del Golfo buscan instaurar en las comunidades vulnerables de Colombia.

Guardar

Nuevo