Ágatha Ruiz de la Prada deja la puerta abierta a pasar la Navidad con Luis Miguel Rodríguez 'El Chatarrero'

Imparable, y en uno de sus momentos de mayor creatividad, Ágatha Ruiz de la Prada pone la guinda a este 2025 tan intenso presentando en su tienda del madrileño barrio de Salamanca el Nuevo Fiat Grande Panda 100% eléctrico que ha transformado y 'agathizado' demostrando una vez más que su universo de colores -en este caso en clave navideña- no tiene límites.

"Nunca sabes por dónde va a saltar la liebre. La ropa, que yo siempre voy vestida de Ágatha y mucha gente va vestida de mí, pero en fin, todas esas cosas desde la bolsa, el carrito de la compra, los chocolates, los aceites... y por fin tengo una colección de juguetes" ha expresado orgullosa del abanico de productos que ha diseñado y creado en los últimos meses.

A poco más de una semana de Navidad, Ágatha todavía tiene muchos compromisos por cumplir. "Ayer llegué de Aruba y mañana me voy a inaugurar una exposición en un museo de Montevideo, el Museo Torres García, y ya vuelvo justísima, llego el 21, ya estoy casi poniendo la mesa" ha apuntado entre risas, dejando la puerta abierta a celebrar estas fechas tan entrañables y familiares con Luis Miguel Rodríguez 'El Chatarrero', como se rumoreó hace unos días.

Y aunque no ha entrado en si hay posibilidades de reconciliación tras su ruptura en 2020, la diseñadora sí ha confesado que "le tengo que llamar para ver si va a venir o no. Ayer le iba a llamar pero tenía tanto sueño que no le llamé. Se lo dije, pero como tiene un restaurante nuevo, y lo tiene abierto el 25, a lo mejor no puede venir. Pero antes, él el 25 lo tenía un poco así como que no tenía plan, vamos. Pero ahora como tiene tantos nietos y el restaurante y todo, a lo mejor tiene plan".

Su balance de este 2025, muy positivo pese a su polémica separación de José Manuel Díaz-Patón en febrero: "Este año he trabajado muchísimo, me encanta a mí recapacitar pero últimamente es que estoy como tan súper liada entre las maletas, sobre todo desde la vuelta de vacaciones ha sido salvaje. Una locura de viajes y de todo. Y luego todos estos productos que la gente los ve aquí, pero yo tengo que visitar las fábricas, ir a sus ferias, a sus eventos, que no paran de eventos ninguno, y no paro" explica.

Un vertiginoso ritmo en lo laboral que no deja tiempo para pensar en el amor. "La verdad que estoy con amores platónicos. Que también lo platónico es muy bonito. A mí me encanta lo platónico porque no tiene nada malo, solo tiene bueno, ¿no? Es una cosa... Aparte me estoy leyendo la historia de la filosofía y entonces esto del amor platónico me tiene bastante arrebatada. Y si de repente pasa algo pues dices qué maravilla, te sostiene cuando estás cansada o aburrida" confiesa.

Por último, y tras responder a Carmen Lomana asegurando que no recuerda su noche más loca -en la que la socialité ha contado que volvió a casa sin el cinturón-, Ágatha ha aclarado qué pasó finalmente con el espectacular ático que tenía a la venta en el Paseo de la Castellana de Madrid: "Al final lo he alquilado. Lo he alquilado porque ya me harté de tanta visita y de tanta cosa y lo he alquilado a un amigo mío, que encima es súper amable y adorable y casi doy más fiestas en su casa que en la mía".