Ginebra, 21 ene (EFE).- Expertos en derechos humanos de Naciones Unidas pidieron este martes al Gobierno de Tailandia que detenga la posible expulsión de 48 personas de la minoría musulmana uigur a China, alegando que podrían sufrir tortura o maltrato.
Los 48 uigures forman parte de un grupo de unas 350 personas detenido en Tailandia en 2014 tras cruzar irregularmente la frontera, y que han estado detenidos de facto en régimen de incomunicación durante más de una década "sin acceso a abogados, contacto con familiares" o representantes de la ONU, señalaron en un comunicado.
"Estas personas no deben ser devueltas a China, y en lugar de ello se les debe brindar acceso a trámites de asilo y otra asistencia humanitaria, médica y apoyo psicosocial", agregaron, recordando que 23 de los 48 uigures sufren problemas graves de salud.
También recordaron que cinco detenidos uigures en Tailandia han fallecido en los últimos once años, entre ellos dos menores, bajo "inadecuadas condiciones de detención, incluyendo falta de acceso a atención médica".
Firman el comunicado entre otros la relatora de la ONU para la tortura, Alice Jill Edwards, y el Grupo de Trabajo de Naciones Unidas sobre Detenciones Arbitrarias.
Grupos de derechos humanos y diversos gobiernos occidentales han acusado repetidamente a China de detener a centenares de miles de uigures, etnia musulmana de lengua túrquica en la región noroccidental de Xinjiang, con la excusa de combatir el terrorismo yihadista y el extremismo en esa zona de Asia Central. EFE