París, 26 may (EFE).- El francés Richard Gasquet quiere ser eterno en París. El día que igualaba el récord de participaciones en el Grand Slam de tierra batida que tenía en solitario el español Feliciano López, 21, el galo superó la primera ronda ante el croata Borna Coric, 7-6(5), 7-6(2) y 6-4.
A punto de cumplir 38 años, el jugador de la generación de Rafa Nadal se niega a asegurar, como el español, si será su última participación en Roland Garros, aunque igual que su coetáneo reconoce que el final está cerca: "O a finales de esta temporada o a mediados de la siguiente".
Todo dependerá de cómo reacciones su cuerpo que este domingo estuvo en un buen nivel frente a Coric, haciendo las delicias del público local que aclamó la gesta de su veterano paisano.
Poco después de haber disputado su partido número 1.000, el galo es un ejemplo de longevidad y no se pierde un Roland Garros desde 2009.
Aquel fue el segundo de los dos únicos años que faltó a su cita con la tierra batida de París, que se inició en 2002 y donde en 2016 tocó su techo en los cuartos de final.
Durante muchos años, Gasquet ha llevado sobre sus espaldas el peso de la responsabilidad del país anfitrión, al que no ha podido dar una alegría.
De hecho, ha sido en otras latitudes donde ha tenido sus mejores resultados en Grand Slam, las semifinales del Abierto de Estados Unidos de 2013 y de Wimbledon de 2007 y 2015.
Con casi 19 años ininterrumpidos en las pitas, Gasquet, que está en el cuadro final gracias a una invitación de los organizadores, porque su ránking no era suficiente, prolongó su sueño y ahora se medirá al vencedor del duelo entre el italiano Jannik Sinner, número 2 del mundo y ganador del Abierto de Australia, y el estadounidense Christopher Eubanks. EFE
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