Argentina declara casa infancia de Maradona lugar histórico

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BUENOS AIRES (AP) — La pequeña casa de una barriada pobre en las afueras de Buenos Aires donde el astro Diego Maradona pasó su infancia fue declarada lugar histórico nacional justo a poco de cumplirse el primer aniversario de su muerte.

El presidente argentino Alberto Fernández firmó el miércoles un decreto por el cual la vivienda situada en la calle Azamor 523 de Villa Fiorito, suburbio al sur de la capital argentina, queda bajo la órbita de la Comisión Nacional de Monumentos, de Lugares y de Bienes Históricos.

“La casa natal de Diego Armando Maradona representó para él, durante toda su vida, la fidelidad a sus orígenes y los profundos lazos que lo unían con su familia”, según la resolución que se oficializó antes del 30 de octubre, cuando el ex futbolista hubiera cumplido los 61 años.

Maradona falleció el 25 de noviembre de 2020 a causa de un paro cardiorrespiratorio, mientras cumplía una internación domiciliaria en una casa alquilada en las afueras de Buenos Aires, tras una cirugía en que se le extrajo un edema craneal.

La justicia imputó a siete profesionales de la salud por supuesta negligencia médica. La causa sigue bajo investigación.

En la casa de la calle Azamor se instalaron los padres de Maradona, Diego Maradona y Dalma Salvadora Franco, junto a las hermanas mayores del ex jugador procedentes de la provincia de Corrientes en busca de mejores oportunidades. Allí nació Maradona en 1960 y otros cinco hermanos.

Villa Fiorito es una barriada pobre que fue creciendo al ritmo de la migración interna a mediados del siglo pasado. En una de las canchas de barro, conocida como potreros, Maradona aprendió los primeros trucos con el balón. Allí también tuvo lugar la entrevista en la que con apenas diez años confesaba que su sueño era salir campeón del mundo con Argentina, lo cual cumplió en 1986.

Y allí vivió hasta que que pudo mudarse junto a su familia a una casa mejor gracias al primer contrato que firmó con el club Argentinos Juniors, donde debutó como profesional a fines de la década de 1970.

"La enorme influencia del impar futbolista en la cultura popular argentina trasciende sus méritos deportivos y lo constituye a la luz de su reciente fallecimiento como uno de los símbolos más reconocibles de nuestra identidad”, resaltó el decreto presidencial.