Estaba todo dado para el regreso a la actividad de Ricardo Caruso Lombardi, debido a que selló su vinculación con Sarmiento, la entidad que echó a Sergio Lippi por los malos resultados (navega en la zona de descenso). Sin embargo, surgieron trabas legales y la Asociación del Fútbol Argentino no habilita al excéntrico entrenador a sentarse en el banco hasta que solucione la rescisión con Arsenal, su antiguo club.
Para el elegido por el Verde, se trata de un apriete para que acepte el ofrecimiento del club de Sarandí, que le adeuda más de cuatro meses de sueldo. "Me llamó Cristian Bragarnik (NdR: el nuevo gerenciador de Arsenal) y me hizo una oferta irrisoria. Me quieren pagar una suma que no llega ni a la mitad de lo que me deben. Si no me paga, yo no puedo rescindir. Pero es un apriete para que acepte y pueda llegar a Sarmiento", denunció con todo su fastidio a cuestas.
Además de pegarle a la Asociación de Técnicos porque "no me defiende", Caruso explicó que insólitamente Arsenal no tuvo ningún impedimento para que Sergio Rondina, su sucesor, desempeñara las funciones con normalidad. "Que me digan cómo hicieron para meterlo, si las leyes dicen que eso no se puede hacer ¿Lo habilitaron porque Arsenal es Arsenal? ¿Porque quedó gente de Julito Grondona ahí adentro? Es todo muy turbio y raro", salió con los tapones de punta en diálogo con Estudio Fútbol.
Caruso afirmó que "solamente quiero cobrar lo que me corresponde" y destacó que los compromisos incumplidos por la institución del Viaducto son "septiembre, octubre, noviembre y diciembre, además de un pedazo de agosto". Además, relató que las dificultades principales son de sus colaboradores: "Están sin cobrar desde agosto y estamos en marzo... ¿Cómo no los voy a defender? Si no me pagan iré a juicio, entonces tendrán que pagarme hasta junio de 2016 porque ahí terminaba el contrato y cobraré cuando se pueda, porque así se manejan de esta manera".
¿Cuál será la solución al conflicto? Por ahora, un misterio. Caruso le dio su palabra a Sarmiento y firmó los papeles, pero esta novela podría forzar su salida. Mientras tanto, en Junín esperan su llegada para esta noche.