En la web son varias las modelos que aparecen vinculadas a sitios porno sin su autorización. Ese es el caso de Bárbara Lorenzo, una de las diosas que desfiló en el concurso de La mejor cola Reef, que fue víctima del uso indebido de su imagen.
La joven demandó a Google y le solicitó una indemnización de 35 mil pesos porque su imagen aparecía ligada a una página con contenido erótico. El juez Carlos Gorri ordenó al buscador pagarle esa suma y quitar de sus índices las fotos en cuestión.
"Algunas de las imágenes de la actora que corresponden a producciones fotográficas consentidas por ésta y aún en caso de vulneración de la intimidad, los responsables de los hechos son terceros ajenos por los que no debe responder", respondió la empresa norteamericana.
"Nos hallamos ante la concreta generación de un nuevo producto, elaborado sobre la base de la información recabada, con un concreto valor de mercado, en el que opera como entidad empresarial, poniendo a disposición de sus clientes los datos así procesados", fue la respuesta del juez.
Algo similar ocurrió con la estrella brasilera Xuxa que también solicitó al buscador que se quiten de Internet fotos de un desnudo que ella no quería saliera a la luz. También se avanzó judicialmente contra Google en el caso de Jazmín de Grazia, ya que un tribunal determinó que se eliminen las imágenes de la modelo que se publicaron de su cuerpo horas después de su muerte.