Los sí y los no del albergue transitorio

Hombres y mujeres destacaron las ventajas y desventajas de tener relaciones lejos de casa y en un sitio pago

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Desde hoteles de lujo hasta cuartos económicos, todo es posible para aquellos amantes o parejas formales que buscan un poco acción en un lugar neutral para ambos. Estos sitios son cada vez más frecuentados por los argentinos en cualquier horario y momento de la semana. Ya no se espera al viernes o al sábado.


Una encuesta a parejas realizada por el sitio chileno Terra destacó los "sí y los no de ir a un motel". Por lo general, todos coincidieron en las respuestas. Hubo preguntas relacionadas con la limpieza y hasta con la comida.



Los no:


Salubridad:

el tema de la limpieza es uno de los detalles que las parejas nombraron en forma negativa. Aseguraron que las camas, las sábanas, los baños y las almohadas son los objetos que dan más asco.



La planificación:

saber a lo que vas hace que la pareja pierda toda la naturalidad y espontaneidad del momento. Le quita romanticismo a la noche de amor y la carga de presiones y malos entendidos.



Los mitos:

muchas mujeres admitieron tener miedo a que los filmen en la cama y luego se venda el video en el mercado negro.



Los sí:


Desconexión: 

las parejas revelaron que es una excelente forma para desconectarte y potenciar la creatividad. "Lo recomiendo como una forma de salir de la rutina que tanto destruye a una pareja?, dicen.



Privacidad:

encuestados explicaron que en los hoteles alojamiento se logra mayor intimidad, cuando ninguno de los dos vive solo. Y para los que sí, es una buena forma de cambiar de ambiente, utilizar jacuzzi y dormir tranquilo "y después de unas horas salir como si nada?.



El despertar de los sentidos:

en un motel se tiene más acceso a cosas que estimulan y que de alguna manera despiertan los sentidos medio adormilados con la rutina diaria. Desde baños de hidromasajes, hasta comida, o destapar champañas frías para la ocasión.