Vuelta al cole: cómo evitar el exceso de peso en las mochilas para no causar daños en la columna

La carga excesiva es uno de los problemas más comunes de los niños de edad escolar. ¿Cuál es el peso ideal para evitar consecuencias a largo plazo? Un especialista brindó recomendaciones

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Se debe prestar atención al peso que lleva cada niño al colegio en sus mochilas, ya que podría afectar la columna vertebral (Getty Images)

Volver al colegio no es para nada sencillo, sobre todo cuando la lista de todas las cosas que se deben comprar no para de crecer. Cartuchera, lápices, sacapuntas, carpetas y más conforman un equipaje diario de ida y vuelta que puede suponer una carga excesiva para los niños.

"Utilizar la mochila de forma inadecuada puede traer graves consecuencias perjudiciales para la salud, especialmente para los hombros y la espalda. Es por ello que hay que prestar mucha atención en el tipo de mochila que usen, la carga de la misma, la colocación y postura del niño", afirmó el médico quiropráctico Marcelo Barroso (MN 9784) a Infobae.

Los pesos mal distribuidos en la mochila puede generar un cambio irreparable en la columna (Getty Images)

La columna vertebral de un niño se encuentra en desarrollo y no es tan madura como para cargar mucho peso ni tampoco para hacerlo en forma prolongada. "Cuando los niños cargan más peso ponen en peligro el desarrollo de su espalda y el dolor se siente", afirmó el especialista.

Y esto puede afectar la salud a futuro: en la adolescencia, las malas posturas se acentúan y los pesos inapropiados y mal distribuidos, como el de las mochilas, pueden ser el origen de problemas a largo plazo.

Cómo elegir la mochila más conveniente

El diseño

"Los tirantes deben ser anchos y acolchados, para reducir la compresión a nivel axial, aportar bienestar y facilitar una mejor distribución del peso a través de los hombros", dijo el especialista.

Es importante que las mochilas tengan comodidades para reducir el peso del alumno que cargará con todos los útiles (Getty Images)

-Se recomienda que los niños utilicen una mochila que se adapte a sus condiciones físicas, limitando la cantidad de útiles que los alumnos puedan llevar.

-Debe llevar bolsillos y compartimentos para organizar mejor todo lo que llevan.

-El respaldo debe de ser acolchado y firme para mayor comodidad y protección.

-Como accesorio, la presencia de un cinturón lumbar estabiliza y distribuye mejor la carga y así aumenta su comodidad.

La posición

Es importante cuidar la zona lumbar de cada uno de los chicos (Getty Images)

-La mochila debe llevarse a la altura adecuada, ajustada entre la parte superior de la espalda y la zona lumbar y colocada sobre los dos hombros, para evitar deformidades posturales.

-La parte baja de la mochila debe quedar unos 5 centímetros por encima de la cintura, de este modo la mochila no perjudica la zona lumbar.

-No llevar la misma, ajustada a la altura correcta, produce desviaciones posturales y sobre esfuerzos musculares.

El peso

Los bolsillos y compartimientos internos deben estar presentes en el diseño que elija cada estudiante (Getty Images)

-Los niños deben cargar en sus mochilas sólo lo que sea necesario, siendo el límite de carga recomendado un 10%-de su peso corporal. Los escolares no deben cargar con un peso superior al 10% de su cuerpo, es decir, si un niño pesa 40 kilos, la mochila no debiera sobrepasar los 4 kilos.

-El sobrepeso de las mochilas puede causar lesiones en los hombros, producir dolores lumbares, cervicales y contracturas en los trapecios.
Los hombros no están diseñados para soportar una carga mayor, de modo que si los sobrecargamos se producirá tensión muscular y posibles lesiones.

-Se ha evidenciado que cuando el peso de la mochila excede los límites recomendados, produce un aumento de la inclinación hacia delante del cuerpo e incluso una alteración en el consumo de energía, con la consecuente disminución del volumen pulmonar.

Tamaño y duración

-El tamaño de la mochila debe ser proporcional a la espalda y altura del niño. "Es un error la tendencia de los padres comprarles una mochila grande. Lo conveniente es cambiarla cada 1 ó 2 años, ya que su tamaño tiene que ser adecuado a la edad y la altura, no pueden ser excesivamente grandes", afirmó el médico Barroso.

La mochila se debe adecuar al niño (Getty)

Una alternativa es utilizar las clásicas mochilas de ruedas, que evitan la carga en los hombros y en la columna. En ambos casos, es necesario no excederse con el peso, ya sea en una mochila de colgar o la de rueditas.

Es importante resaltar que llevar peso sobre en la espalda supone hacerlo inteligentemente, entonces si la mochila pesa más del 10% del peso corporal, se genera un problema posterior de la columna, la que debe esforzarse para cargar el exceso, afectando la biomecánica.

"Así, va cambiando el centro de gravedad, alterando la marcha y haciendo que paulatinamente las funciones orgánicas generales como la respiración, se vean afectadas, reduciendo los volúmenes de oxígeno pulmonares y el aire que necesitamos para las diferentes actividades, lo que acrecienta nuestra fatiga, nos quita vitalidad y por ende afecta nuestra calidad de vida", enfatizó el médico.

La actividad física en los más pequeños es obligatoria para poder fortalecer la espalda (Getty Images)

Por último,el médico recomendó fomentar la actividad física entre los niños para el fortalecimiento de la espalda, "la musculatura de los niños es débil y no está preparada para aguantar mucha carga. Dicha actividad física debe ser preferentemente sin impacto, armoniosa, blanda como la natación, yoga stretching, pilates, o si hacemos actividades más duras, o de impacto como vóley, fútbol, running, deberemos incorporar el hábito del stretching, como medida para retirar la tensión del cuerpo", concluyó el profesional.

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