Fresca y auténtica: los secretos de Susan Sarandon para desafiar el paso del tiempo a los 75 años

En las últimas horas se viralizó un video donde recibió muchos halagos por su belleza, pero no es la primera vez que la actriz revoluciona las redes sociales por su firme postura frente a los estereotipos

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El video de Susan Sarandon que se viralizó en Twitter y obtuvo millones de reproducciones

“Madre, activista y actriz”, así se define Susan Sarandon en su cuenta de Instagram. El orden en que menciona cada ítem no parece casual, sino más bien la secuencia de sus prioridades. Teniendo en cuenta la lucha personal que enfrentó para ser mamá, las causas sociales y ambientales que abraza desde su adolescencia, y la carrera que eligió gracias a la combinación de su vocación con un guiño del destino, no quedan dudas que son las tres facetas que la identifican. En las últimas horas su nombre trepó en las tendencias de Twitter por un video reciente, donde posó frente al espejo en bata.

“Tengo 75 años″, responde con orgullo la actriz, cuando una de las estilistas la elogia por su look en el clip que se hizo viral. Efectivamente, el próximo 4 de octubre cumplirá 76, y tal como ha hecho en oportunidades anteriores, elige transmitir el mensaje de que no existe la edad límite para luchar por sus ideales. Cabe recordar que en vísperas de inaugurar sus siete décadas, caminó por la alfombra roja de Cannes con un vestido aterciopelado de escote profundo, derribando el prejuicio sobre qué puede ponerse y qué no una estrella de Hollywood.

Hace menos de tres años había sufrido un accidente doméstico que afectó su rostro, y en aquel entonces mostró en primer plano la inflamación que tenía en su cara y explicó: “Un pequeño resbalón se convirtió en conmoción cerebral, fractura de nariz, y golpe en la rodilla”. Dos semanas más tarde llevó tranquilidad y contó que empezó a mejorar con el correr de los días, y una vez recuperada del todo, volvió a grabar los clips donde da a conocer iniciativas sustentables en su feed. La protagonista de Thelma and Lousie no le teme a los primeros planos al natural, ni a las fotos imprevistas de los paparazzi cuando alza un cartel durante una manifestación.

Tal como en la saga de Bad Moms, Susan Sarandon vistió una campera de cuero negra durante una entrevista sobre el activismo (Shutterstock)

En 2017, la revista Vogue le consultó sus secretos para desafiar el paso del tiempo y lo primero que atinó a decir fue: “Sigo pensando que soy más joven, ¡y lo siento por dentro!”. Luego enumeró algunas de las recomendaciones generales que trata de aplicar: “Hay que mantener el compromiso y la curiosidad como actitud frente a la vida, y creo que mantenerse hidratado y no hacer nada demasiado extremo también”. Y agregó: “No fumar es muy importante, cuidarse del sol, y tampoco soy de beber mucho alcohol; si bien un poco de vino con moderación es bueno, el exceso no ayuda a estar saludable”.

También bromeó sobre “los buenos genes que le dio su madre”, y trató de desviar la conversación hacia lo que ella considera realmente “belleza”. Fiel al concepto de que no es el envase, sino lo que contiene, aconsejó que sean fieles a sus convicciones. “Lo mejor es ser auténtica; si he aprendido algo con la edad, es a ser honesta conmigo misma y a permitirme un poco de diversión de vez en cuando”, explicó. En este sentido, hizo especial hincapié en el daño que puede causar la permanente comparación con otras mujeres, y caer en la obsesión de querer ser alguien más.

“La belleza que plantean es injusta, arbitraria y caprichosa, pero para mí, una persona hermosa es alguien fuerte y hermoso por dentro, que se propone dejar un mundo mejor; y eso es lo que trato de hacer en mi vida”, sentenció. En este sentido, el largo listado de su labor solidaria incluye distintas temáticas: viajó a Nepal para lanzar una campaña para construir viviendas, fue a Grecia a ayudar a rescatar a refugiados e inmigrantes, es embajadora de UNICEF y miembro de la organización solidaria Heifer Internacional, una organización que dona animales de granja a familias que los necesitan para poder subsistir.

Susan Sarandon deslumbró en la alfombra roja del Festival de Cannes en 2017 con un vestido verde de escote cruzado

En 2018 fue detenida mientras participaba en la Marcha de las Mujeres en Washington. No era su primera vez, en 1999 también fue detenida en Nueva York cuando participaba en una sentada pacífica para protestar contra la violencia policial contra la comunidad afroamericana. “Si no estuviésemos aquí hoy, entonces significaría que lo que ha pasado es aceptable y normal, y creo que eso no sirve. Creo que es hora de centrarnos en este tema, y el racismo no es aceptable. No creo que haya que recortar libertades civiles para sentirnos más seguros”, fueron las palabras que expresó hace dos décadas.

Susan Abigail Tomalin -tal es su verdadero nombre, ya que su apellido artístico surgió de su matrimonio con Chris Sarandon- fue la primera de los nueve hijos que tuvo el matrimonio de Philip Lesley y Lenora Criscione. Aunque creció en una familia de valores católicos y tradicionales, solía escaparse de la escuela de monjas para participar de las marchas para protestar por la guerra de Vietnam, y reclamar derechos civiles. Ese mismo espíritu la acompaña hasta nuestro días, y con un veloz recorrido por su galería de Instagram, quedan a la vista todas las injusticias que denuncia: la homofobia, la brutalidad policial, el medio ambiente, el cáncer de mama, la pobreza infantil, la especulación inmobiliaria, la pena de muerte y el maltrato animal.

Susan Sarandon en una protesta en Washington contra la política migratoria de Donald Trump algunos años atrás (AP)

En cuanto a su vida personal, cuando faltaban pocos años para cumplir 40, recibió el diagnóstico de endometriosis, y en ese entonces los médicos le aseguraron que solo podría tener hijos si se sometía a una cirugía. Sin embargo, mientras vivía una incipiente relación con el director Franco Amurri, quedó embarazada a los 37 años, y así llegó al mundo su primogénita, Eva, quien se dedicó también a la actuación. Durante su longevo romance con Tim Robbins, se convirtió en madre de Jack, actualmente director de cine y Miles, músico y actor.

Por estos días Sarandon sigue comprometida con el activismo, y también se espera que se retome el proyecto de la tercera entrega de Bad Moms, donde disfrutó de calzarse la chaqueta de cuero y demostrar cierta rebeldía en la piel del personaje de Isis. En 2019 ella misma confirmó que estaba en sus planes sumarse a la trilogía, y que esta vez la trama se centraría en las abuelas, más que en las madres, es decir que regresarían Christine Baranski, como Ruth, y Cheryl Hines, como Sandy. Debido a la pandemia de coronavirus, la filmación quedó como uno de los pendientes de su exitosa carrera, y en IMDb figura que fue oficialmente anunciada, pero todavía no inició la etapa de producción.

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