Un grupo de estudiantes del colegio Don Bosco de Río Grande, Tierra del Fuego, vivió una situación insólita durante su viaje de egresados a San Carlos de Bariloche. Tres adolescentes que pertenecían al contingente fueron olvidadas por la empresa de turismo Travel Dance cuando comenzó el viaje de regreso a Río Grande, y quedaron varadas en el hotel donde se habían alojado durante los días que estuvieron en la ciudad rionegrina.
Las estudiantes, dos de 17 años y una de 18, bajaron al hall del hotel con su equipaje a esperar la salida del colectivo pero luego decidieron volver a sus habitaciones para acostarse a dormir. El resto del contingente se subió al micro y comenzó el viaje sin ellas, sin que ninguno de los coordinadores se diera cuenta de que faltaban tres chicas del grupo.
El hecho ocurrió el último lunes y tuvo una resolución rápida después de que una de las estudiantes olvidadas llamará a su madre para contarle lo que había sucedido. A partir de ahí se generaron un sinnúmero de comunicaciones entre los padres para intentar resolver la situación.
El tiempo pasó y los padres no pudieron comunicarse con el coordinador que estaba a cargo del viaje. Cuando lo hicieron, la empresa decidió que las tres adolescentes se embarquaran en otro colectivo y viajaran hasta la localidad de Perito Moreno, Santa Cruz, donde las esperaría el resto del grupo.
"No nos dimos cuenta que nos faltaban tres pasajeras", indicó el coordinador de la empresa de turismo Facundo Arizaga. "Cuando nos dimos cuenta se tomó la decisión de continuar con el viaje. La decisión que se tomó es la que se tomó en ese momento. Puede estar bien o mal pero es la decisión que se tomó", sostuvo Arizaga en declaraciones a FM Aire Libre.
"Lo que sucedió es algo mínimo, no fue tan grave", señaló, en referencia al olvido de las pasajeras. Y agregó, "no hacía falta que se haga ninguna denuncia policial. Son muchos chicos y estas cosas pasan". Uno de los padres de las adolescentes realizó una denuncia en una dependencia policial luego de enterarse de lo que había sucedido con su hija.
Andrea Colicinio, la madre de una de las jóvenes olvidadas, contó cómo fue el diálogo con el coordinador cuando lograron comunicarse. "Comenzó a gritarme y a increparme diciendo que mi hija era la única responsable, porque ella se fue a dormir y no se quedó con el grupo. Mientas me gritaba todo esto lo estaban escuchando en la comisaria. Luego de enterarse que estábamos haciendo la denuncia me cortó y se comunicó en otros términos con la otra mamá", aseguró.
"Mi hija no tiene su documento, tampoco tiene su ropa; es una vergüenza lo sucedido, yo sé que mi hija tiene un 50% de responsabilidad, pero arriba del colectivo el único responsable es Facundo, quien intentó endulzarme el oído diciendo que no empañe el viaje con esto. Ellos nunca se detuvieron o volvieron para buscar a mi hija, yo hasta el momento no he podido hablar con ella, porque su celular no tiene carga", afirmó.