La cena de Navidad es, sin lugar a duda, la celebración familiar más importante del año y aunque los excesos alimentarios de una sola noche no son suficientes para generar problemas de salud en una persona promedio aparentemente sana, la sumatoria de todos los excesos de diciembre si lo pueden hacer; incluso, una sola cena abundante podría generar el agravamiento de ciertas condiciones de salud en personas con enfermedades preexistentes.
En el Perú, la cena pueda variar de región a región, no obstante, está integrada principalmente por pavo (u otras carnes), arroces en diferentes preparaciones (también puede incluir distintos tipos de tamales), purés (manzana, membrillo, camote), ensaladas (sobre todo aquella de papa, betarraga y zanahoria), chocolate, panetón, gaseosas y bebidas alcohólicas. En conjunto, y según un estudio que llevamos a cabo unos años atrás, la cena de Navidad puede aporte alrededor de 2378 kcal, es decir, todo lo que una persona promedio debería consumir a lo largo de todo el día. Además, posee una alta cantidad de grasa (casi 90 g) y azúcar añadida.
A continuación, compartiremos algunas recomendaciones que podrían hacerle menos agresiva para el cuerpo.
- Aunque es tradicional, evite cenar a la medianoche. Todos los alimentos presentes en la cena son muy difíciles de digerir y mucho más en la noche. Trate, en lo posible, de cenar antes de las 10 pm.
- Evite repetir más de una vez un plato o servirlo abundantemente. Seleccione una porción de carne, aquella con menos grasa. Consuma una porción de arroz o fideos o papa, pero evite consumir las tres cosas a la vez. En lo posible, incluya vegetales frescos.
- La mayonesa es uno de los aliños más empleados como base aglutinante en las ensaladas, sin embargo, trate de utilizar bases con menos contenido de grasa como el yogur descremado o simplemente agregue un chorro ligero de aceite de oliva.
- Deje el panetón o el chocolate para el día siguiente, de ese modo evitará una sobrecarga de azúcar y grasa. Sin embargo, si preparará chocolate emplee leche semidescremada o descremada, evite agregarle mantequilla y use tabletas que contengan pasta de cacao como primer ingrediente.
- Coloque en la mesa bebidas y refrescos naturales y que no contenga azúcar añadida y si utiliza alguna bebida gaseosa escoja las opciones sin azúcar.
- El brindis es un momento importante en la cena, sin embargo, trate de no beber más de una copa o en su defecto utilizar las versiones sin alcohol disponibles en el mercado. Les aseguro que no notarán la diferencia entre una bebida con alcohol y una cero alcohol.
En general, ninguno de los componentes de la cena de Navidad es malo por sí mismo, el problema es la cantidad consumida y las combinaciones que podemos llevar a cabo. Sin embargo, algunas personas como, por ejemplo, los pacientes oncológicos podrían tener dificultades para consumir ciertos alimentos.
Las náuseas, vómitos y otras molestias gastrointestinales son frecuentes en este tipo de pacientes. De ser el caso, es mucho más importante todavía que la cena sea lo más temprano posible. Consuma porciones pequeñas. Si va a consumir lácteos en alguna preparación que sean bajos en grasa. No consuma alcohol ni agregue grasa de manera innecesaria a la comida.
En otras condiciones el paciente podría presentar alteraciones en el control de su glucosa en cuyo es mejor evitar el consumo de panetón o ensaladas como aquellas que mezclan papa, betarraga y zanahoria porque tienen un impacto significativo sobre la elevación del azúcar en sangre.
Finalmente, si tuviera alguna duda consulte con su especialista para que le pueda brindar una asesoría adecuada.