Hace más de dos años que la pandemia por la COVID-19 acabó con la vida de miles de personas en el país, pero una de las imágenes que toda familia recuerda es la carencia de los balones de oxígeno e incluso el alto costo de este. Sin embargo, un reportaje del Punto Final reveló que más de 10 mil cilindros medicinales fueron comprados por Legado, pero nunca se usaron hasta el día hoy.
La adquisición se habría realizado por la suma de seis millones de soles a una empresa ecuatoriana en abril del 2021. Desde el segundo semestre se procedió a ser distribuido a los hospitales del Ministerio de Salud (Minsa). En este tiempo, cientos de familias buscaban balones para salvar la vida de un ser querido, una agonía que aumentaba a cada minuto.
Sin embargo, los hospitales devolvieron estos balones brindados por Legado, debido a que no contaban con disco de ruptura (válvula) y estampa de inspección de calidad. Es decir, no cumplía con los términos técnicos, por lo cual fueron almacenados en el sótano de la Villa Panamericana, en el distrito de Villa El Salvador, lugar donde se instaló cuartos para albergar a miles de contagiados tras el colapso de los centros de salud.
Explicaciones de Legado
La administradora de Legado, Sara Solsol, afirmó que pusieron “excusas tras otra” y han tratado de cumplir con todas las exigencias del Minsa. “Si ustedes van a los hospitales donde están distribuidos estos balones, van a ver que están usando y que ninguno de ellos ha reportado ningún riesgo o explosión”, agregó.
De la misma manera, Giovana Bueno, subadministradora de esta institución pública adscrita al Ministerio de Transportes y Comunicaciones, aseguró que encuentran a la espera de la aprobación de la cartera de Salud para que sean nuevamente entregadas.
Asimismo, manifestó que, si bien no sirve para atender la emergencia de hace un año, ayudaría para los otros casos. “Nosotros queremos entregarlos, pero depende del Minsa”, acotó.
El Minsa, a través de un comunicado, detalló que los balones de oxígenos otorgados por Legado, pero fueron rechazados, porque “las características técnicas imposibilitan su llenado y posterior uso en favor de los pacientes”.
Contraloría investigará
Ante la denuncia, la Contraloría General informó que procedieron a recopilar información para investigar las compras de los balones en medio de la pandemia y que, luego de dos años, no se han utilizado.
A comienzos de la pandemia, no solo se reportaba la alta demanda de camas UCI, sino también de los balones de oxígeno para salvar la vida de una persona. Ante ello, en algunos lugares el costo era el doble hasta el triple. Cientos de familias hacían largas colas o pernoctaban a la espera de su llenado de si cilindro para ser trasladado al hospital y proceder a ser el intercambio.