Marianne, cartera jubilada: “He pasado toda mi vida trabajando y cobro 1.240 euros netos al mes”

La funcionaria se jubiló en 2020, poco antes de cumplir los 62 años, tras una carrera marcada por el paso del servicio postal francés de administración pública a sociedad anónima

Imagen de archivo de empleada de Corres España (EuropaPress)

Marianne tiene 66 años, trabajó más de cuatro décadas como cartera en Correos de Francia (La Poste) y hoy cobra 1.240 euros netos al mes de pensión. Se jubiló en 2020, poco antes de cumplir los 62 años, tras una carrera marcada por el reparto de correo en pueblos bretones y por el paso del servicio postal francés de administración pública a sociedad anónima. “He pasado toda mi vida trabajando”, resume. “Y aunque estoy agradecida, me parece poco para tantos años de servicio”.

La historia de Marianne, recogida por Le Figaro, refleja la evolución de un sector que durante décadas garantizó estabilidad laboral y prestaciones aseguradas. Cuando comenzó a trabajar en 1979, La Poste todavía formaba parte de la función pública. “Entonces se decía los PTT. Yo era funcionaria titular”, recuerda. Con el tiempo, la compañía se transformó en una sociedad anónima con capital estatal, un cambio que modificó progresivamente el régimen de sus empleados. En 2020, casi la mitad de su plantilla seguía bajo el estatus público.

Antes de incorporarse al servicio postal, Marianne trabajó en una explotación lechera. “Mis padres conocían al dueño, y allí estuve hasta que me casé, con 20 años”, explica. Después, se trasladó con su marido a Bretaña e ingresó en La Poste como cartera en el departamento de Ille-et-Vilaine. Su labor consistía en repartir cartas “del lunes al sábado, en bicicleta, hiciera frío o calor”. Su rutina laboral se mantuvo prácticamente inalterada durante décadas y siempre en el mismo entorno rural.

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“Lo que más me gustaba era estar cerca de la gente. Me conocían bien, porque siempre hacía las mismas rutas”, afirma. Esa relación diaria con vecinos y comercios formó parte del vínculo tradicional entre los carteros y los habitantes de zonas rurales en Francia. Marianne también interrumpió su actividad en tres ocasiones para cuidar a sus tres hijos, algo habitual en su generación.

Cuando dejó el servicio postal, su salario era de aproximadamente 1.610 euros netos mensuales. Su pensión se calculó, como corresponde a los funcionarios, sobre la base de los seis últimos meses trabajados. Además del cobro mensual, mantiene varios beneficios vinculados a su carrera en La Poste, como un abono telefónico gratuito, una tarjeta bancaria sin comisiones y condiciones ventajosas en descubiertos en La Banque Postale.

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“He trabajado toda mi vida. Ahora quiero disfrutar del tiempo libre”

Marianne no se vio afectada por la reforma de pensiones aprobada en 2023 en Francia, que elevó la edad mínima de jubilación y provocó protestas masivas en todo el país. Aun así, mira con preocupación el futuro laboral de las nuevas generaciones. “Nosotros teníamos estabilidad. Hoy, la mayoría son empleados de derecho privado y sus condiciones ya no son las mismas”, señala. Su comentario apunta a la progresiva reducción del peso del empleo público y las garantías asociadas a ese sistema.

Pese a sus reservas sobre la evolución del mercado laboral, Marianne asegura que está disfrutando de su retiro. “He trabajado toda mi vida. Ahora quiero disfrutar del tiempo libre, cuidar de mis nietos y pasear sin prisa”, comenta. Su caso se suma al debate sobre la suficiencia de las pensiones en un contexto en el que Francia, al igual que otros países europeos, enfrenta el envejecimiento de la población y el desafío de financiar las jubilaciones futuras con una base laboral cambiante.

Marianne representa a una generación que accedió a empleo estable, reconocimiento profesional y beneficios sociales consolidados. Hoy observa cómo el entorno laboral que conoció se transforma y cómo las condiciones de acceso a la jubilación se endurecen para quienes comienzan ahora su vida laboral. Su testimonio resume una etapa del servicio postal francés marcada por cercanía, continuidad y estabilidad.

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