La experiencia viral de una paciente con el medicamento que la Seguridad Social financia para dejar de fumar: “Estoy tan contenta que quería animaros”

Lupe narra su historia en Twitter. “A las dos semanas se me olvidó que alguna vez había fumado. Eso no me había pasado nunca. Puede fumar gente a mi lado que me da igual”, asegura

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Una mujer deja de fumar. (Freepik)
Una mujer deja de fumar. (Freepik)

Dejar de fumar es todo un hito en la vida de los adictos al tabaco y una experiencia desafiante debido a la dependencia física y psicológica que la nicotina provoca. La nicotina es una de las sustancias adictivas más potentes, y su adicción puede ser tan intensa como la de drogas como la heroína o la cocaína. Intentar dejarlo conlleva síntomas muy desagradables, como ansiedad, irritabilidad, cambios de humor, aumento del apetito, problemas para concentrarse y sobre todo, ansias intensas.

El grado de dificultad para superar la adicción varía de una persona a otra y puede estar influenciado por múltiples factores, incluidos la duración y la intensidad del hábito de fumar, la presencia de apoyo social, acceso a métodos de cesación y la capacidad de manejar el estrés. Y como no, de la fuerza de voluntad que tenga cada uno.

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La lucha de Campi para dejar de fumar

Pero por suerte, hoy en día existen diversas estrategias y herramientas que pueden ayudar a las personas a dejar de fumar, como programas de reemplazo de nicotina, medicamentos recetados, terapia cognitivo-conductual, aplicaciones móviles, grupos de apoyo y más. La combinación de fármacos y apoyo conductual suele incrementar significativamente las tasas de éxito en la cesación tabáquica.

La historia de Lupe

Este es el caso de una tuitera que ha usado un medicamento que financia el Estado y ha compartido su buena experiencia en redes. “Hace más de un mes dejé de fumar usando Todacitan, una medicación que están financiando desde la Seguridad Social. Os cuento mi experiencia por si le ayuda a alguien que se lo esté planteando”, publicó en X (antigua Twitter) Lupe.

Esta usuaria narra que llevo muchos años fumando, fumaba mucho y que lo he dejado muchas veces. “Era bastante escéptica a volver a dejarlo de nuevo pero lo intenté porque me costaba explicarle a mis hijos que hacía algo sabiendo que era dañino”, explica. Lo intentó y esta vez ha sido distinta. “Hace falta un poco de fuerza de voluntad pero el mono se vuelve muy leve. Sobre todo noté que se pasaba como en media hora así que sabía que aguantando un rato estaría bien”, apunta.

Los primeros días Lupe cuenta que se encontraba bien, excepto algún mareo leve. “Lo había dejado con Champix durante la pandemia y tenía efectos secundarios mucho más marcados y desagradables”, asegura. “A las dos semanas se me olvidó que alguna vez había fumado. Eso no me había pasado nunca. Puede fumar gente a mi lado que me da igual. En momentos de mucho estrés he pensado en un cigarro pero enseguida se me ha olvidado. No es el sufrimiento de las veces anteriores”, reconoce.

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Y ya de paso Lupe también ha dejado de beber alcohol porque le resulta “desagradable”. “Eso no me lo esperaba. A veces me pido una cerveza o vermut por la costumbre pero no me acabo el vaso”, indica. “Esta es mi experiencia y habrá otras pero estoy tan contenta que quería animaros”, afirma. Aunque también ha recibido muchos comentarios de personas que aseguran que consiguieron dejarlo sin ningún tipo de ayuda química. Les responde, con ironía, que “enhorabuena por ser mejores que yo”.

Cambio de hábitos

Entre los numerosos comentarios que ha recibido también los hay positivos. Algunos tuiteros se preguntaban por el cambio de hábitos, una cuestión fundamental para dejar de fumar. “Como tenía súper fijados algunos cigarros del día me acostumbré a hacer otras cosas en ese rato (después de las comidas, sobre todo). En mi caso fue ordenar. Es ridículo porque nunca he ordenado en mi vida pero me dio por ahí”, asevera.

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Y añade: “Convertía la ansiedad en energía, digamos que ordenaba con ira. Y como siempre he sido desordenada, encima me sentía super orgullosa de esos brotes así que me reforzaba el cambio de hábito”.

Qué es Todacitan y para qué se utiliza

Todacitan ayuda para dejar de fumar y para aliviar la ansiedad que se produce cuando se deja de fumar.El objetivo del tratamiento de Todacitan es el abandono permanente del hábito de fumar, según asegura la Agencia Española de Medicamentos.

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El uso de Todacitan permite una reducción gradual de la dependencia de la nicotina mediante el alivio de los síntomas de abstinencia. Cualquier persona interesada lo primero que debe hacer es acudir a su médico. No obstante, a continuación compartimos una serie de casos en los que no debes usar este medicamento:

  • si es alérgico a la citisina o a alguno de los demás componentes de este medicamento (incluidos en la sección 6),
  • si padece angina inestable,
  • si tiene antecedentes de infarto de miocardio reciente,
  • si sufre de arritmias cardíacas con relevancia clínica,
  • si ha tenido recientemente un derrame cerebral,
  • si está embarazada o en período de lactancia.
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