El DNU de Milei y el resultado de su primera licitación del Tesoro preanuncian euforia para las acciones y los bonos

El nuevo Decreto “Bases para la Reconstrucción de la Economía Argentina”, que desregula prácticamente toda la actividad económica, tendrá resistencias de los sindicatos y opositores, pero la fuerza de los inversores no debería ser menospreciada

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Operadores de Wall Street (EFE/EPA/JUSTIN LANE)
Operadores de Wall Street (EFE/EPA/JUSTIN LANE)

El mercado intuyó que iba a haber reformas, pero se mantuvo en calma. Necesitaba tener precisiones sobre el DNU presidencial y el resultado de la licitación de las Letras del Tesoro.

Ambos datos se conocieron cuando los mercados ya estaban cerrados, pero despertaron euforia en los analistas económicos, empresarios e inversores.

La desregulación que anunció el presidente Javier Milei es la más amplia que conoció la Argentina porque además de la reforma laboral, la liberación de importaciones, la reforma aduanera, la liberación de alquileres y la derogación de leyes que regulaban el comercio, quita trabas a sectores importantes de la economía y pone en pie de privatización no solo a las empresas estatales sino a los clubes de fútbol.

En las redes hubo mayoría de elogios a la decisión, pero en las calles hubo algunos cacerolazos. Anónimos y conocidos estaban asombrados porque lo que sucedió superó a lo que esperaban.

Los que participaron de la licitación de Letras del Tesoro, por caso, se encontraron con que no tenían enfrente a un hombre tradicional de la Economía, sino a un trader del mercado.

El ministro de Economía, Luis Caputo, exhibió ese costado y presentó con éxito la nueva Letra de Descuento S18E4. Recibió ofertas por más de $11 billones y solo aceptó $2,1 billones para no convalidar tasas superiores a 8,66% que está en línea con lo que se paga por plazos fijos. La reducida tasa, en relación con el costo de vida, sorprendió, pero no tanto como la decisión posterior de utilizar los $3 billones captados en la licitación para recomprar deuda del Tesoro en manos del Banco Central.

Para el analista financiero y especialista en agro mercados, Salvador Vitelli la tasa que se pagó por las Ledes fue menor a lo que se esperaba. “El mercado algo intuía, porque la Lecer (letra que ajusta por inflación) estaba operando en torno a 9,5% y hoy (por ayer) lo hizo a 8,3%. Si uno mira el monto ofertado hubo $11 billones y el factor de prorrateo fue de hasta un 40%. Lo que pasó allí fue un exceso de pesos ofrecidos además de una expectativa por la renovación de la tasa fija. Si uno observa el escenario inflacionario, es una tasa que queda muy por debajo en términos reales y que al mismo tiempo si uno mira contra la historia es apenas superior a la última tasa fija convalidada que fue la LELITE allá por octubre que estaba apenas 2,3% por encima de la tasa efectiva anual. Lograr esta tasa tan baja es una buena señal para esta licitación”, dijo.

Durante la rueda los dólares financieros estuvieron tranquilos. Muchos operadores atribuyen la paz cambiaria a intervenciones del Central, algo inexistente porque la entidad no tiene bonos AL30 y tampoco aparece en la plaza con otros títulos.

El trader Esteban Monte señaló que “esta paz se debe a cuatro situaciones” que las detalló de la siguiente manera:

- La falta de pesos que hay en la calle. Esto se vivió post elección presidencial 2019.

- Las empresas venden dólares para pagar los salarios y aguinaldos de sus empleados.

- Tenemos a los exportadores que liquidan en el contado con liquidación (CCL) el 20% de sus ingresos.

- Se estaba a la espera de la licitación de Letras del Tesoro que busca lograr el desarme de las Leliq.

Monte opinó que “esta oferta de divisas, que redujo más la brecha post devaluación del tipo de cambio oficial, puede ser algo estacional o temporal. También hay que recordar que aún rigen restricciones de la Comisión Nacional de Valores (CNV) que impiden a particulares y a las empresas a acceder con normalidad a los dólares financieros y en particular al CCL donde pueden operar un monto mínimo con previo aviso. Habrá que ver que sucede cuando desaparezcan estas restricciones”.

Lo cierto es que el MEP ayer perdió $18,21 (-1,9%) y cerró en $946,47. El CCL subió $1,87 (+0,2%) a $946,67. El “blue” aumentó $5 a $995.

El informe de la consultora F2 de Andrés Reschini señaló que en el Mercado Único y Libre de Cambios (MULC) sigue el achicamiento del volumen de operaciones que en la rueda fue de USD 239 millones, el menor desde el salto devaluatorio, lo mismo que para el saldo comprador del Banco Central de USD 171 millones netos. “Por otro lado, tras la licitación del Tesoro hubo $9,5 billones que fueron rechazados y habrá que ver qué rumbo toman. Este dato, sumado a la calma de los dólares financieros denota que la estrategia de Caputo sigue dando pasos exitosos hacia el saneamiento del balance del Banco Central y la normalización del mercado cambiario. Esto se vio en el mercado de futuros donde los fines de mes ajustaron en rojo, excepto enero 2024 que subió 0,57%”, destacó.

Tras las compras del Central, las reservas aumentaron USD 95 millones a 22.757 millones.

La Bolsa intuyó lo que iba a suceder en la licitación, algo que no es extraño porque la mayoría de los participantes eran bancos. De allí que el monto de negocios creció casi 30% a $22.175 millones y el S&P Merval de las acciones líderes aumentó 0,48% en pesos y 0,8% en dólares.

Los bancos fueron los grandes ganadores. Supervielle subió 9,38%; Macro, 5,14% y BBVA, 4,97 por ciento.

Los ADRs -certificados de tenencias de acciones argentinas que cotizan en las Bolsas de Nueva York- tuvieron una rueda mixta. Los ganadores fueron los mismos que triunfaron en la rueda de ayer de Buenos Aires: Supervielle (+8,4%), Macro (+5,6%) y BBVA (+5%).

Para hoy se espera una rueda de euforia tanto en bonos como en acciones. El nuevo Decreto “Bases para la Reconstrucción de la Economía Argentina” de 83 páginas que desregula prácticamente toda la actividad económica, es una revolución para la mayoría. Tendrá resistencias de los sindicatos y opositores, pero la fuerza de los inversores no debería ser menospreciada.