El ministro de Economía Sergio Massa continuó este domingo con las reuniones compartimentadas con sus funcionarios para apuntalar más medidas en los próximos días, como respuesta al duro dato de inflación de abril y ante la perspectiva de una nueva volatilidad cambiaria en el mercado, tal como sucedió hace un mes. Tras la primera tanda de anuncios, apareció en la mesa de análisis en las últimas horas un tema que tendrá especial peso esta semana: el financiamiento del Tesoro y la emisión de deuda, justo después de un incremento anunciado en la tasa de interés del Banco Central.
El jefe del Palacio de Hacienda tuvo este domingo al menos dos series de reuniones, por la mañana con un grupo de funcionarios de su mesa chica tras haber informado Economía cómo sería la primera oleadas de medidas. A grandes rasgos, fueron: un reajuste en la tasa de interés del BCRA, el aviso de que insistirá con la intervención con reservas para mantener a raya los dólares financieros, y un grupo de decisiones para administrar el comercio exterior de manera más minuciosa, advertencias sobre la apertura de importaciones de algunos insumos, junto con un abaratamiento del Ahora 12 y un plan de facilidades fiscales.
Hubo en ese set de medidas una diagnóstico que sobrevoló las últimas horas de análisis cruzados entre las distintas áreas del Ministerio de Economía: que un primer objetivo era buscar una señal lo más urgente y al alcance de la mano posible para morigerar una reacción cambiaria este lunes, y que además debía complementarse con anuncios direccionados a la actividad económica, como pueden ser las nuevas condiciones para el plan de compra en cuotas y los planes de pago de deuda tributaria.
Fondeo
Una segunda reunión de Massa fue, por la tarde, con su equipo financiero, ese grupo de funcionarios que están más pendientes de asegurarse el fondeo al Tesoro de manera quincenal, cuando la Secretaría de Finanzas realiza licitaciones de deuda para pagar los vencimientos que se aproximen -el escenario de mínima- pero también para sumar dinero de manera neta y utilizarlo para cubrir el déficit fiscal sin necesidad de acudir a la asistencia desde el Banco Central.
El secretario Eduardo Setti y el subsecretario de Financiamiento Leandro Toriano son los principales hombres de Massa en el ida y vuelta con el mercado local y son quienes diseñan el menú con los que todos los meses Economía sale a buscar financiamiento de bancos, fondos comunes de inversión o compañías de seguros. Sin despacho en el Palacio de Hacienda pero con un peso específico relevante en la agenda financiera aparece Lisandro Cleri, además vicepresidente del Banco Central, y también con vínculos permanentes con el universo inversor doméstico.
La cuestión financiera toma importancia esta semana porque tendrá lugar la primera de las dos operaciones de colocación de bonos prevista para mayo. Este mes el Gobierno deberá cubrir al menos los 1,1 billones de pesos que habrá de obligaciones de pago, buena parte en manos de tenedores privados. En los días previos a las licitaciones, Setti y el equipo de finanzas le dan forma a la oferta de bonos que pondrá sobre la mesa Economía -atados a la inflación, al dólar o a ambos, tasa fija, a descuento y a qué plazos- y el día de la licitación se pulsea con los inversores sobre qué interés está dispuesto a pagar el Poder Ejecutivo por tomar pesos prestados.
En términos generales, en los despachos oficiales sostienen que la tasa que ofrezca el Tesoro debería ser por definición más atractiva que la del Banco Central, para direccionar los pesos del mercado hacia el financiamiento del déficit. Por el reajuste de tasa de interés que anunció el equipo económico este domingo, que pasará para las Leliq y los plazos fijos a ser de 97% anual -y de 154% anual efectiva-, Finanzas así también deberá hacer su propio retoque de tasas.
En las últimas licitaciones, sin ir más lejos, ya lo había hecho. En la última, a fines de abril, llegó a ofrecer un techo de 95,86% nominal anual para una letra con vencimiento el último día de julio. El menú definitivo con el que saldrá a captar pesos del mercado se conocerá en los próximos días. El viernes vencerán $370.000 millones de capital una Letra atada a la inflación, el martes otros $144.000 millones de intereses un Bonte a 2027 y el último día de mayo, una Letra a Descuento por otros $476.000 millones, según estimaciones de la Oficina de Presupuesto del Congreso (OPC).
El Ministerio de Economía busca que el dato de inflación de abril, que fue de 8,4%, por encima de las expectiativas del mercado, no tengan un correlato desde este lunes en las cotizaciones de los dólares financieros como el contado con liquidación y el MEP. El mes pasado, tras conocerse el IPC de marzo de 7,7% tuvieron una fuerte reacción al alza durante la segunda quincena del mes.
Más allá de las tasas: la primera tanda de anuncios
El paquete de anuncios de este domingo, el primero de una serie que aseguraron tendrá continuidad a lo largo de la semana, incluyó un impulso al consumo financiado en cuotas y una administración más minuciosa del comercio, tanto interno como las operaciones que se hacen hacia y desde el exterior.
Ante una nominalidad más alta mes a mes, que puede anticipar decisiones de consumo y además hacerlo en cuotas, el Gobierno buscará empujar más las compras bajo esa modalidad y para eso hará más barato el plan Ahora 12 para el consumidor. Según informó el Ministerio de Economía, a partir de mañana el costo de financiamiento en doce pagos será 9 puntos porcentuales menor al nivel que tiene en la actualidad, que es de 77,35% de Tasa Nominal Anual (TNA), de acuerdo a información de la Secretaría de Comercio. De esa manera, la TNA debería pasar a ser de 68,35 por ciento.
Entre las medidas de estímulo para el sector de micro, pequeñas y medianas empresas Economía instrumentará un plan de alivio fiscal para deuda vencidas al 30 de abril. El paquete incluirá planes de facilidades de pagos para cancelar obligaciones tributarias y aportes de seguridad social vencidas por un monto $456.063 millones.
Monitoreo
Por otra parte, el Gobierno aplicará un control más exhaustivo de las operaciones de comercio interno y externo. En ese sentido, se anunció la creación de la Unidad de Seguimiento, Trazabilidad y Promoción de las Operaciones de Comercio.
El nuevo ente tendrá como objetivo “monitorear operaciones de compra y venta de bienes y servicios en el comercio interno y externo. Promover con equidad las operaciones comerciales, evitando posiciones dominantes. Verificar la trazabilidad de los bienes objeto de comercio y la correcta tributación en cada etapa. Orientar al consumidor atendiendo las variables obtenidas en el proceso de seguimiento”, consideraron desde el equipo económico.
Por otro lado, Economía decidió otorgarle un nuevo rol al Mercado Central, que será habilitado en el Registro de Importaciones y “ante el abuso de las empresas por posición dominante podrá importar en forma directa dichos productos con Arancel Cero creando mayor oferta de productos sin costo de intermediación”.
El objetivo, apuntaron desde el Palacio de Hacienda, es “reducir el precio efectivo de venta al público de productos frescos (frutas, verduras, hortalizas, carnes) y productos secos no perecederos (alimentos de primera necesidad)”. Se trata, subrayaron, de “defender el poder de consumo de las personas”. Los productos así importados serán luego ofrecidos al publico y a comercios minoristas de cercanía de manera directa.
Otro capítulo del ataque al aumento de precios será la suspensión de derechos antidumping en ramas “de insumos difundidos”; esto es, que afectan un amplio espectro de actividades industriales y tienen alta incidencia en la producción y el precio de los alimentos. El objetivo es reducir el precio efectivo de las importaciones de ciertos insumos, fomentar la competencia en ramas altamente concentradas y disminuir los precios a lo largo de la cadena de valor”, explicaron desde el Palacio de Hacienda.
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