Copa Davis: Argentina busca sede, mientras Coria resuelve su encrucijada

Comienza otra temporada y vuelven los dolores de cabeza para la Argentina. Devaluación, problemas económicos y la encrucijada del capitán Guillermo Coria ponen un marco de incertidumbre y ansiedad de cara a los Qualifiers de febrero

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Coria dialoga con todos los candidatos (REUTERS/Ciro De Luca)
Coria dialoga con todos los candidatos (REUTERS/Ciro De Luca)

El cambio de Gobierno y la situación económica del país llevaron a las autoridades de la Asociación Argentina de Tenis a trabajar en conseguir un lugar que pueda recibir la nueva edición de la Copa Davis, pero que, a su vez, no choque con los intereses económicos de los torneos que se realizan, en la misma fecha en el país. Mientras los dirigentes visitan y evalúan, Guillermo Coria resuelve la difícil decisión en la conformación del equipo.

Ni bien conocido el sorteo del rival y la localía, desde la AAT cruzaron los primeros mensajes con la Federación Internacional, para que no fueran tan estrictos con los plazos de definición de la sede. “Tuvieron en consideración la crisis y el momento particular que está viviendo nuestro país y, si bien tenemos un plazo, fueron flexibles con los tiempos”, contaron desde las oficinas de la calle Maipú.

La búsqueda de un lugar acorde a las expectativas que se generan en cada Copa Davis llevó a explorar nuevas posibilidades. A comienzos de este siglo se utilizó Córdoba, luego fue el territorio de CABA el que monopolizó la competencia en sus dos sedes (Buenos Aires Lawn Tenis Club –BALTC- y el Parque Roca), a excepción de las dos series que se jugaron en Mar del Plata (la final de 2008 y la primera ronda de 2014). Luego de ganar la ensaladera y con Argentina compitiendo sólo en Zona Americana, la provincia de San Juan se hizo fuerte. Para ese entonces, ya coexistían el Córdoba Open y el Argentina Open, por orden de aparición en el calendario.

Teniendo en cuenta la situación económica del país y respetando el esfuerzo de ambos organizadores es que la dirigencia de la AAT no sólo no quiere conflictos de territorio, sino que, además, busca no interponerse en el trabajo que realizan ambos certámenes ATP que se disputan inmediatamente y a continuación de los Play Off de Copa Davis, en el mes de febrero.

Descartado el BALTC por las obras que se están realizando y la tribuna tubular que debe levantarse para el Argentina Open, una primera búsqueda llevó a aprovechar la realización del reciente WTA 125, en el Tenis Club Argentino (TCA), para evaluar posibilidades. Una rápida mirada le comenzó dando un posible descarte al club detrás del Planetario por los espacios para llevar a cabo la serie, la proximidad física con el BALTC y la cercanía con la fecha de realización del torneo de Buenos Aires.

Con Córdoba sucede algo similar. A pesar de que el presidente de la AAT, el ex tenista Agustín Calleri, es también el presidente de la Agencia Córdoba Turismo, no le quiere otorgar privilegios a su provincia. Se había pensado como alternativa al predio del Kempes (se va a estar desarrollando la Qualy del Córdoba Open, al mismo tiempo que la Davis) utilizar el Jockey Club cordobés, pero la idea quedó desechada, en principio, por la superposición de fechas.

Así continuaron los descartes de posibles sedes. San Juan no está realizando espectáculos deportivos y tiene altura sobre el nivel del mar, algo que quieren evitar los jugadores argentinos, para restarle velocidad a la pelota. Una situación similar ocurre con Mendoza. Entonces, se empezó a pensar en ciudades a nivel del mar, con calor y humedad. ¡La Costa! En plenas vacaciones es una buena ocasión para juntar público y aumentar la recaudación. “No se puede pensar en hacerlo en Mar del Plata, porque les va a quedar incómodo a nuestros jugadores”, decían desde el interior del equipo argentino. Después del largo viaje desde Australia, los tenistas deberían llegar por tierra hasta la Costa Atlántica y, una vez culminada la serie, viajar a Córdoba, por eso “había que pensar alguna otra alternativa que los favorezca”.

“Cerca, Rosario siempre estuvo cerca”, dice la canción de Fito Páez. A sólo 300 kilómetros de Buenos Aires y de camino a la capital cordobesa, la ciudad santafesina aparece como la gran candidata a quedarse con la sede, por primera vez, de una serie de Copa Davis. Los puntos a favor de Rosario son que los jugadores no sufrirían demasiado los traslados, está de camino a Córdoba, casi a nivel del mar, tiene historia tenística y el capitán argentino sería local. Desde lo organizativo, la ciudad brinda la infraestructura necesaria y Guillermo Coria tiene muy buena relación con el intendente local, algo que terminaría de cerrar la decisión final para que el Jockey Club de Rosario reciba los Qualifiers 2024.

Aún faltan ajustar algunos detalles que comenzaron a ir resolviéndose en reuniones de este fin de semana, pero no tendrán muchos días más para definirlo. Dentro de la idea general es desalentar a Aleksandr Bublik, número uno de Kazajistán, a que venga a la Argentina. No le gusta el polvo de ladrillo ni disfruta el juego de regularidad y paciencia, algo que no le sobra.

Coria y su disyuntiva

Mientras tanto, el capitán argentino viene jugando la serie desde antes de conocerse el rival. Él sabe que cuenta con tres singlistas inamovibles y que se ganarán el puesto en los entrenamientos, pero también sabe que tiene otros tres doblistas de élite para la pareja de dobles, por lo que le estaría sobrando un jugador y es uno de ellos el que va a quedar afuera. Tanto Horacio Zeballos, como la dupla que conforman Machi González y Andrés Molteni participaron del Masters, en el que el marplatense llegó a la final y en donde vencieron en la fase de Grupos, junto a su habitual compañero Marcel Granollers (ESP), a la pareja argentina. Pero también, como para tener en cuenta, resulta muy difícil pensar en separar una dupla cuando el rendimiento ha sido muy bueno.

Esto, sumado a la calidad humana de los jugadores y la gran predisposición a jugar cada serie, lo lleva a Coria a una y otra noche de evaluaciones. Pero aún hay un detalle más, el año próximo hay Juegos Olímpicos y para que un tenista sea elegible debe haber participado de alguna serie de Copa Davis (en el caso de las mujeres, la BJKCup) durante esa temporada o la anterior, y Zeballos no jugó ninguna de las dos series de este año. De no ser parte del equipo en febrero, se perdería París 2024. Este es, en realidad, el punto que desvela a Guillermo Coria, a quien se le habría escuchado varias semanas atrás: “No le puedo cagar los Juegos a Zebolla”. El dilema por cumplirle a sus jugadores es lo que fuerza el análisis del Mago: convocar al mejor doblista argentino del momento o mantener una pareja que ha tenido un año muy exitoso en el circuito, con 5 títulos y el ingreso al Masters.

En febrero pasado, Argentina viajó a Finlandia por los Qualifiers, pero Zeballos tuvo inconvenientes familiares, se lo comunicó al capitán y éste comprendió la situación que terminó dejando al de Mar del Plata sin poder representar al país.

“A Horacio lo dejé afuera en septiembre”, se sinceró Coria por la siguiente convocatoria. En ese momento se inclinó por mantener a la dupla Molteni-González, una pareja que aparecía consolidada en el circuito y que había cumplido en viajar a la fría Helsinki. Un premio y un voto de confianza al que no defraudaron.

Pero, tanto Zeballos como su entorno se ilusionan con que el Mago cumpla con las charlas que mantuvieron durante todo este año y termine decidiéndose por incluirlo en el match frente a los kazajos. Horacio es considerado el mejor doblista argentino de la historia y ninguno de los vinculados al tenis lo imagina fuera de París 2024. Lamentablemente, sólo se puede incluir una sola pareja en el cuadro de dobles. “Si se convoca a Horacio nos da la chance de que si alguno de los tres no puede ir a los Juegos, vaya otro, porque los tres estarían en condiciones de elegibilidad”, comentan desde la AAT.

En ese caso, todo dependerá de que Andrés Molteni y Machi González acepten la decisión del capitán, en caso de que quede uno de los dos afuera de esta nueva convocatoria, y sean parte del equipo. Aunque nadie espera como respuesta al capitán: “los dos o ninguno”.

Una situación similar le ocurrió a Luli Mancini cuando lideraba al equipo argentino y viajó a Sidney con cinco jugadores (en aquel momento lo integraban sólo cuatro). Entre ellos estaba la dupla que componían Gastón Etlis y Martín Rodríguez.

Mancini se inclinó por sólo uno de ellos, Etlis, pero que tampoco llegó a jugar, porque los que ingresaron a jugar fueron David Nalbandian y Mariano Puerta, en un match inolvidable.

La idea de Guillermo Coria es hablar con los jugadores en estas semanas, antes de que viajen a comenzar la temporada 2024 (los tenistas se irán luego de Navidad y antes de Año Nuevo) y comunicarles la decisión, en lo posible, personalmente. Lo que le interrumpe el sueño al Mago, lo que le duele, en algunas noches de convocatorias es que deberá decirle a alguno de los tenistas que, más allá de sus merecimientos no será parte de la serie.

En esta ocasión, no sirve de nada acompañarlos a Oceanía, ya que la ITF exigió que sean los Reyes Magos quienes lleven los nombres de los cinco integrantes de los equipos de cada país.

La cartita de la Argentina llevaría inscriptos los nombres de Francisco Cerúndolo, Sebastián Báez, Tomás Etcheverry, Horacio Zeballos y Machi González.