El estado físico de Juan Martín del Potro luego de enhebrar 15 victorias al hilo es uno de los temas más importantes mientras pelea por conseguir los últimos dos triunfos que lo coronen campeón del Masters 1000 de Miami y lo transformen en el 3 del mundo.
El tandilense pidió asistencia médica durante el partido contra Milos Raonic por los cuartos de final y generó la furia de su entrenador, el croata Goran Ivanisevic. "Hay veces que el cuerpo también te llama la atención y para mí es muy importante lo que siento físicamente. La he pasado muy mal en otros años por no escucharme a mí mismo y la verdad que llamar al médico al terminar el set estaba dentro de las posibilidades", advirtió en una entrevista con ESPN.
El técnico de su adversario lo acusó de "actuar" como si estuviera lesionado, a lo que el tandilense explicó: "No me tomé mucho tiempo, fue solamente ese cambio de lado. El esfuerzo físico lo hago yo, no lo hace el médico. Y mañana tengo que volver a entrar a la cancha yo. Espero estar un poco mejor para disfrutar porque cuando uno está tan cansado se le hace todo cuesta arriba".
El deportista de 29 años entrenó hoy pensando en el duelo de semifinal que afrontará mañana contra el norteamericano John Isner y confesó: "Estoy haciendo un esfuerzo inhumano, estoy perdiendo un poco de potencia que para mí es clave. Ayer fue el partido que más despacio saqué, que más me costó moverme y a medida que van apareciendo dolores nuevos trato de hacer lo mejor posible para que no se note, pero ya me está costando. Es el último esfuerzo".
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