Murió venado de páramo rescatado en la Carrera Séptima de Bogotá

El individuo fue encontrado el pasado 13 de julio en un separador de dicha vía, al norte de la capital de la República. En las últimas horas mostró signos de decaimiento que, al final, segaron su vida

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Venado de páramo rescatado en Bogotá será intervenido por segunda vez. Foto: Secretaría de Ambiente.
Venado de páramo rescatado en Bogotá será intervenido por segunda vez. Foto: Secretaría de Ambiente.

Por complicaciones de salud relacionadas con la herida con la que fue encontrado, el venado de páramo, o “Soche” rescatado por la Secretaría de Ambiente en la Carrera Séptima con calle 127 de Bogotá, falleció en instalaciones de la entidad el pasado domingo 1 de agosto.

Así lo reportó la secretaría luego de que el animal estuvo sometido a un estricto monitoreo para observar la evolución de la herida por la que fue intervenido quirúrgicamente dos veces en las últimas 72 horas.

Pese a mostrar cierta mejoría en la que el venado de páramo, de la especie Mazama Rufina, conocido también bajo el nombre de “Soche”, se mostró alerta, desplazándose y comiendo por sus propios medios, el sábado 31 de julio y las primeras horas del pasado domingo, el animal dio signos de decaimiento y, de acuerdo con la Secretaría de Ambiente, “sus condiciones fueron empeorando hasta su deceso”.

Aunque no se han establecido las causas de muerte del animal, la entidad declaró que: “Al venado se le practicó la respectiva necropsia y se le tomaron varias muestras, que se están procesando en laboratorio. Una vez se tengan los resultados de la histopatología para determinar la causa exacta y concluyente de su muerte, la Secretaría de Ambiente informará”.

El venado de páramo fue hallado el pasado 13 de julio en un separador de la Carrera Séptima, en la localidad de Usaquén por funcionarios de la Secretaría de Ambiente, entidad que dispuso un operativo de protección para salvarle.

Luego de ser sometido a dos operaciones, especialistas adscritos a dicha entidad aseguraron que no el venado no podría ser liberado en su hábitat natural, debido a que en la segunda de dichas intervenciones se le amputó parte de su pata delantera, esto debido a que la herida que presentaba en la extremidad, producto de una fractura abierta, no sanó de manera adecuada.

En ese momento, la autoridad ambiental del Distrito declaró contemplar la posibilidad de adquirir una prótesis que le facilitara la movilidad al venado, asegurando que no podría ser reintegrado a su hábitat natural debido a que su nueva condición le impediría desarrollar sus actividades y continuar con una vida silvestre.

“La Secretaría de Ambiente seguirá haciendo todo lo que esté a su alcance para garantizar el bienestar de este mamífero, y le prestará la atención y cuidados necesarios, que le permitan mejorar su estado de salud”, concluyó la entidad en un comunicado firmado el pasado 31 de julio, cuando el venado aún no presentaba los signos de decaimiento que, al final, le costaron su vida.

Venado de páramo no podrá ser liberado en su hábitat natural luego de su segunda intervención quirúrgica. Foto: Secretaría de Ambiente
Venado de páramo no podrá ser liberado en su hábitat natural luego de su segunda intervención quirúrgica. Foto: Secretaría de Ambiente

Esta especie de venado se encuentra especialmente en ecosistemas de bosque alto y páramo entre los 1.5000 y 3.500 metros de altura y se alimenta de frutas sotobosque, hierbas y ramas que encuentra en estos espacios con abundancia de arbustos.

Sin embargo, las poblaciones de esta especie se han visto reducidas en los últimos años por el impacto ambiental, por esta razón está catalogada en la lista de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (Uicn) como vulnerable.

La Secretaría de Ambiente informó, además, que son 5.000 los individuos rehabilitados y liberados, luego de cumplir su proceso de recuperación de la mano de especialistas suscritos a la entidad.

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