Registraduría revivió a adulta mayor que había sido dada por muerta en Santa Marta

De acuerdo con la Registraduría del Estado Civil, su cédula estaba inactiva desde hace casi un mes por un problema de digitación de la Notaría Primera.

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De acuerdo con la Registraduría del Estado Civil, su cédula está inactiva desde hace casi un mes. Vía: El Heraldo

Un hecho que ha causado indignación en las redes sociales se conoció en la tarde del pasado lunes 29 de marzo. La historia de una señora que fue a aplicarse la vacuna contra el covid-19 y esta no se le suministró porque, supuestamente, en el sistema aparece como fallecida, es una de las nuevas polémicas en el país respecto al Plan Nacional de Vacunación.

Los hechos se presentaron en Santa Marta, cuando una mujer de 75 años, identificada como Francia Helena Hernández Acendra, se acercó a su Entidad Promotora de Salud (EPS) correspondiente para ser inmunizada contra el virus del covid-19 después de una larga espera. Sin embargo, al momento de presentarse ante el personal médico, se llevó una enorme sorpresa.

Según le comentaron a Francia en el punto de vacunación, la Registraduría Nacional del Estado Civil la había reportado como muerta y su cédula estaba inactiva desde el 1 de marzo del presente año, es decir, desde hace 29 días.

De acuerdo con el diario El Heraldo, la mujer reaccionó preocupada y confundida. “¿Que yo estoy muerta?... y no me están viendo aquí”, le dijo enojada al funcionario de la Nueva EPS quien estaba a cargo de la inoculación del biológico.

Lo preocupante del caso es que desde la entidad no pudieron darle una respuesta ante el error cometido por la Registraduría Nacional, y tanto Francia como su hija, Mónica Melo, se marcharon del lugar sin entender qué pasó.

“Esto tiene en shock a mi madre quien no ha parado de llorar. No entendemos qué pasó. La EPS solo nos entregó un documento de la Registraduría y nos informaron que mi mamá estaba por fuera del sistema”, aseguró Mónica, según el mismo periódico.

Por este motivo, la hija de Francia hizo una solicitud a la Registraduría para que otorgara una rápida solución a este problema, ya que la idea es que su madre pueda vacunarse lo más pronto posible al igual que pueda seguir accediendo a todos sus otros derechos que requieren su documento de identidad.

“Solo espero que pronto la Registraduría me reviva porque quiero correr a vacunarme”, dijo la adulta mayor a El Heraldo en ese momento y, afortunadamente, sus plegarias fueron escuchadas, pues a las 5:00 p. m. del martes 30 de marzo, Francia Helena Hernández Acendra volvió a la vida según la Registraduría.

El periódico regional informó que el coordinador del Centro de Información y Atención Ciudadana de la entidad estatal, Rafael Rozo Bonilla, expidió un documento en la tarde del martes por medio del cual se activa la cédula de la señora Francia, con vigencia hasta el 29 de abril, así podrá vacunarse pronto mientras se realiza el trámite completo en la Registraduría para que su cédula siga activa hasta el día oficial de su muerte.

“Ahora estamos listos para llevarla para que la vacunen”, finalizó la hija de Francia Hernández, quien seguramente irá este miércoles, con el certificado que verifica que ella sigue viva en mano, a su EPS para ser vacunada contra el covid-19.

¿Cuál fue el error?

Mónica Melo, hija de la adulta mayor, comentó al medio que, efectivamente, la supuesta muerte de su madre se dio por un error humano. El 1 de marzo de este año, la Notaría Primera envió a la Registraduría un documento en el que informaba la defunción de la persona identificada con el número de cédula 36.529.467, número que corresponde a la cédula de Francia Helena Hernández.

Se trató de un error de digitación en la Notaría Primera, pues quien sí falleció fue la persona identificada con el número 36.529.468, es decir, la única diferencia entre la cédula de Francia y el difunto era el último número y ese cambio entre el 8 y el 7 terminó perjudicando a la adulta mayor que sigue “vivita y coleando”, como ella lo aseguró.

Al respecto, la Registraduría emitió un comunicado en el que aclaró que “el error fue generado al momento de la inscripción de un registro civil de defunción, por parte de la Notaría Primera del Circuito de Santa Marta. En dicho registro se digitó de manera equivocada el número de la cédula de una persona fallecida y en su lugar se transcribió el número de documento expedido a nombre de la señora Francia Helena Hernández Acendra. (...) La Registraduría Nacional del Estado Civil subsanó el error provocado por la precitada notaría con el fin de restablecer la vigencia de la cédula de ciudadanía de la señora Francia Helena Hernández Acendra”.

Este suceso se suma a los ya conocidos casos en diferentes ciudades, en los que diferentes adultos mayores no fueron vacunados ya que las jeringas que fueron utilizadas para aplicar el biológico estaban vacías.

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