La increíble historia de Roko, el perro que pasó un mes "preso" en Uruguay y que divide a una ciudad

Andrea Coria, la dueña del animal acusado de matar a un grupo de ovejas, se encadenó en la puerta de la seccional 7 del Departamento de Policía de Trinidad, en el departamento de Flores, pidiendo su liberación

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Andrea Coria abraza a Roko, su perro
Andrea Coria abraza a Roko, su perro

La vecina de esta ciudad que apenas supera los 20.000 habitantes se dio cuenta de que su perro había desaparecido el 4 de septiembre. Lo buscó varios días, hasta que se enteró de que lo habían "arrestado".

Cuando Andrea Coria fue a buscarlo a la seccional 7 de la Policía de Trinidad, en el departamento de Flores, le dijeron que no podía verlo. Roko, su mascota, estaba incautado por su presunta participación en la matanza de un grupo de ovejas.

Agentes de la fuerza lo habían encontrado en el campo de una mujer. Al lado suyo estaban los animales muertos. Al menos uno estaba dentro de una bolsa.

Un afiche que convocaba a una marcha para pedir la liberación del perro
Un afiche que convocaba a una marcha para pedir la liberación del perro

Según la dueña de las ovejas, dos delincuentes habían usado al perro, de raza pitbull, para matar a los animales y robarse la carne. "Por desgracia nuestra, los malvivientes lograron fugarse, pero dejaron ahí al pobre animal. No lo matamos. La Policía lo incautó", dijo según Montevideo Portal.

Coria no cree que Roko haya sido capaz de eso y sostiene que no se pudo haber escapado, sino que lo robaron. Además, pide que encuentren a los dos hombres que continúan desaparecidos.

Todas estas semanas, la mujer realizó una intensa campaña en las redes sociales para pedir la liberación de su perro. Hasta convocó a una marcha, que no dio mayores resultados.

Coria asegura que su mascota es inocente
Coria asegura que su mascota es inocente

Desesperada, se encadenó este lunes frente a la fiscalía. Gabriela Rusiñol, titular de la dependencia, trató de persuadirla de que se fuera. Sólo pudo convencerla cuando le dijo que al día siguiente iba a liberarlo. La fiscal cumplió con su palabra este martes a la tarde.

"Me dijo que la investigación iba a seguir, porque yo también quiero saber quién robó al perro de mi casa. Me lo dio y quedamos en que va a hablar con el dueño del campo y yo me voy a hacer cargo de pagarle la oveja que estaba al lado de Roko", le dijo Coria a El País.

"Desde que salimos toda la gente nos saludaba. Siento una felicidad enorme que no me cabe en el cuerpo", afirmó.

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