Al menos trece muertos y casi un centenar de heridos al descarrilar el tren Interoceánico en el sur de México

Las investigaciones para esclarecer las circunstancias del descarrilamiento del tren Interoceánico en el sur de México avanzan luego de que, según la Secretaría de Marina mexicana, aún hay 62 lesionados hospitalizados y múltiples fuerzas de seguridad están desplegadas en la zona para ofrecer atención a los afectados. El accidente, ocurrido el domingo en las inmediaciones de Nizanda, Oaxaca, causó la muerte de trece personas y dejó “casi un centenar” de heridos, como reportó el medio original.

Según publicó la Secretaría de Marina en un comunicado citado por el medio, el siniestro tuvo lugar cuando la locomotora principal del tren Interoceánico que circula por la línea del istmo de Tehuantepec se descarriló con 250 pasajeros a bordo, incluidos nueve integrantes de la tripulación. Del total de heridos, 98 personas resultaron con lesiones, de las cuales 62 permanecen internadas bajo supervisión médica, mientras que las 36 restantes recibieron atención y posteriormente fueron dadas de alta al presentar heridas de menor gravedad. La dependencia precisó que 139 pasajeros que viajaban en la unidad ya se encuentran fuera de peligro.

El operativo de emergencia desplegado por las autoridades comprendió tanto la asistencia médica a las víctimas como la búsqueda y rescate de quienes pudieron quedar atrapados. De acuerdo con la Secretaría de Marina, este esfuerzo se realiza en coordinación con otras dependencias federales y estatales, con el objetivo de esclarecer los motivos que provocaron el descarrilamiento. Adicionalmente, la dependencia indicó que seguirá colaborando en la investigación para determinar tanto las causas técnicas como posibles responsabilidades derivadas del incidente.

El tren involucrado en el accidente forma parte de la línea Interoceánica que conecta el istmo de Tehuantepec, el corredor de tierra más angosto que une los océanos Pacífico y Atlántico en México. Según detalló el medio, este tramo resulta estratégico para el transporte de pasajeros y mercancías. El descarrilamiento interrumpió temporalmente el servicio y generó preocupación respecto a la seguridad de la infraestructura férrea en la región.

En reacción al suceso, la presidenta mexicana Claudia Sheinbaum ordenó la movilización inmediata de altos funcionarios federales hacia la zona afectada. De acuerdo con el medio, Sheinbaum instruyó al secretario de Marina, Raymundo Pedro Morales Ángeles, y al subsecretario de Derechos Humanos de la Secretaría de Gobernación, Félix Arturo Medina Padilla, para que atendieran personalmente a las familias de las víctimas y supervisaran la atención a los heridos. La mandataria comunicó estas indicaciones mediante la red social X.

En relación con la asistencia a los afectados, la coordinación médico-hospitalaria en Oaxaca activó protocolos para recibir simultáneamente a múltiples lesionados, priorizando a quienes presentaban cuadros de mayor gravedad. El despliegue incluyó ambulancias, personal de protección civil, bomberos y elementos de la policía local y federal, quienes aseguraron el perímetro e intervinieron en las tareas de traslado y atención de heridos, de acuerdo con lo reportado por la fuente original.

Las autoridades federales reiteraron su compromiso con la transparencia en la investigación del incidente. La Secretaría de Marina destacó la importancia de determinar las condiciones en las que se produjo el siniestro y anunció la recopilación de testimonios de sobrevivientes y personal ferroviario. El medio consignó que el resultado de estas pesquisas será compartido con el público tan pronto se obtengan conclusiones verificadas.

El accidente despertó muestras de solidaridad y condolencias a las familias de las víctimas tanto por parte de funcionarios como de representantes de organizaciones civiles. La respuesta institucional incluyó el establecimiento de módulos de información para familiares y la disponibilidad de líneas telefónicas para quienes requerían información sobre el estado de los pasajeros afectados, según informó la fuente original.

El descarrilamiento del tren Interoceánico representa uno de los siniestros ferroviarios más graves en la región en los últimos años, por la magnitud de las víctimas involucradas y el impacto en la conectividad de la infraestructura. La línea del istmo de Tehuantepec, al conectar zonas clave para el desarrollo económico, es utilizada diariamente por pasajeros y operadores logísticos, por lo que el incidente generó también preocupación a nivel estatal y federal sobre los protocolos de seguridad aplicados a este tipo de transporte. El medio destacó la actuación de los cuerpos de emergencia, que permanecen en alerta para atender cualquier situación derivada del accidente mientras avanzan las tareas periciales.

Hasta la emisión más reciente del comunicado de la Secretaría de Marina, mantenían la cifra de trece fallecidos, 98 heridos, y 62 hospitalizados, con otros 139 pasajeros a salvo. A la par, las autoridades reiteraron el llamado a la ciudadanía a mantenerse informada a través de los canales oficiales y a no difundir información no confirmada relacionada con el accidente o la condición de las víctimas.