Podemos critica el discurso "vacío" del Rey, al que ve que le quedan "lejos" los problemas de la clase trabajadora

Según declaraciones de Lucía Muñoz, secretaria de Derecho a la Vivienda de Podemos, durante el mensaje navideño emitido por el Rey Felipe VI el pasado miércoles 24 de diciembre, el jefe del Estado no hizo referencia a varias cuestiones consideradas centrales por algunos sectores sociales, como el proceso de rearme europeo, el desvío de recursos públicos al gasto militar, las crecientes dificultades para acceder a la vivienda, los retos en materia de sanidad y la precariedad en el empleo. A su juicio, estas omisiones muestran desconexión entre la Casa Real y la realidad que enfrenta la clase trabajadora de España, eje de la noticia principal reportada inicialmente por el medio que difundió estas declaraciones.

De acuerdo con la cobertura de ese medio, Muñoz acusó al Rey de pronunciar un discurso “vacío”, ajeno a los problemas que afrontan los sectores más vulnerables del país. La política enfatizó que Felipe VI pidió reducir la polarización y la crispación en el debate público, pero soslayó que estos fenómenos derivan, en gran medida, del aumento sostenido de las desigualdades en España. Según Muñoz, tales desigualdades afectan principalmente a personas que no recibieron mención en el mensaje real.

El medio detalló que la intervención pública de Muñoz, realizada el jueves posterior al discurso, recogió una crítica sobre la perspectiva adoptada por Felipe VI en su alocución, a la que acusó de mantenerse distante de las preocupaciones sociales. También planteó que, tras años de lo que consideró una actitud irresponsable frente al auge de la ultraderecha, el racismo y el nacionalismo excluyente, el Rey habría incurrido en una retórica que, a su entender, contribuye a reforzar posiciones antipolíticas. Declaró: “El Rey sigue jugando para los fascistas y este año estructura un discurso cuya idea central es un relato tramposo sobre la convivencia y la concordia al más puro estilo Campofrío”.

Entre sus señalamientos, Muñoz censuró igualmente la tendencia del monarca a aplicar lo que describió como una equidistancia artificial entre actores opuestos de la sociedad españolas. Cuestionó que Felipe VI invite a un mismo ejercicio de reflexión a víctimas y victimarios, a fascistas y antifascistas, a racistas y antirracistas, y a machistas y feministas, equiparando posiciones que, para la portavoz de Podemos, no pueden ser tratadas como equivalentes. Profundizó en esta idea expresando: “El Rey nos viene a decir que ni nazis ni judíos ni genocidas, ni palestinos, ni víctimas ni agresores sexuales”, e ironizó sobre la utilidad de esta “falsa equidistancia”, que, en su perspectiva, solo sirve para proteger a quienes conservan y se benefician de estructuras de poder que considera injustas, incluyendo, según su afirmación, a la propia institución monárquica.

La crítica de la dirigente de Podemos abarcó además la ausencia de referencias en el discurso al proceso de rearme europeo, al que acusó de desplazar grandes sumas de inversión pública hacia la defensa militar en un contexto donde considera que persisten dificultades urgentes en ámbitos sociales. Entre esos ámbitos, detalló la falta de acceso a una vivienda adecuada, las carencias en la sanidad y la falta de empleos estables como retos actuales para millones de ciudadanos en España.

Según publicó el medio que difundió estas declaraciones, otros temas omitidos por el mensaje real, según Muñoz, incluyen el auge de la extrema derecha a nivel europeo, la supuesta complicidad con el genocidio en Palestina y la presencia de discursos racistas excluyentes en instituciones de la Unión Europea. Muñoz consideró especialmente significativo que el Rey evitase mencionar al movimiento feminista y no se refiriera en forma explícita a la dictadura franquista ni a la lucha contra las violencias de género.

En su intervención, Muñoz sintetizó el sentir de Podemos respecto a la institución monárquica y al papel desempeñado por la Casa Real en el contexto social y político español. La formación morada interpreta que el discurso navideño de Felipe VI representa una oportunidad desaprovechada para abordar de manera directa los desafíos sociales y políticos que afectan a los sectores más desfavorecidos.

El medio consignó que, para la representante de Podemos, el llamado general del Rey a la convivencia y la concordia resulta falto de compromiso real con la pluralidad y con los reclamos de los colectivos que, afirma, continúan excluidos del debate institucional. Bajo esta perspectiva, el mensaje navideño sería percibido desde ese partido no solo como insuficiente, sino como un ejemplo de la distancia existente entre la institución monárquica y las preocupaciones cotidianas de la población trabajadora.