La Justicia de Azerbaiyán dicta prisión preventiva contra el principal líder opositor, Alí Karimli

Autoridades azerbaiyanas mantienen bajo custodia a Alí Karimli, figura destacada de la oposición, tras acusaciones de intento de derrocamiento del Gobierno, mientras su partido denuncia acciones represivas y exige la inmediata liberación del político y sus colaboradores

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El Frente Popular de Azerbaiyán sostiene que la detención de su líder y de uno de sus asesores constituye un acto de persecución dirigido a menoscabar la actividad de la oposición, y ha reclamado la liberación inmediata de ambos. Según consignó el medio Qaynar Info, un tribunal del país dictó prisión preventiva contra Alí Karimli, principal figura del partido opositor, a raíz de la imputación formal de intentar tomar el poder por la fuerza y modificar la estructura constitucional, cargos derivados del artículo 278.1 del Código Penal.

El proceso judicial se inició después de que el político, de 60 años de edad y al frente del Frente Popular de Azerbaiyán desde el año 2000, fuera arrestado este sábado durante una redada efectuada por los servicios de seguridad en su domicilio, según publicó Qaynar Info. El tribunal ordenó su encarcelamiento por más de dos meses, en espera del juicio por los cargos mencionados, con una permanencia bajo custodia pautada hasta el 13 de febrero, de acuerdo a lo declarado por el propio Karimli mediante un mensaje difundido en redes sociales.

La Fiscalía azerbaiyana presentó la acusación formal que apunta a la presunta organización de un complot para lograr la destitución del presidente Ilham Aliyev, siguiendo las acusaciones recogidas por Qaynar Info. Karimli negó rotundamente tales señalamientos y calificó la causa nuevamente como una "persecución" política. Junto a Karimli, también permanece detenido Mammad Ibrahim, uno de sus colaboradores cercanos, tras haberse realizado una intervención policial simultánea en residencias vinculadas a ambos.

El partido opositor emitió un comunicado en el que reiteró que la actuación de las autoridades forma parte de una estrategia más amplia para atemorizar a sus integrantes y obstruir la organización interna del movimiento opositor, como informó el portal Qaynar Info. Además, el Frente Popular demandó públicamente la excarcelación tanto de Karimli como de Ibrahim y calificó la causa judicial como injustificada.

De acuerdo con el reporte de Qaynar Info, la imputación bajo el artículo 278.1 del Código Penal por “intentar hacerse con el poder de forma violenta y cambiar la estructura constitucional del Estado” representa una de las acusaciones más graves que puede afrontar un dirigente político en Azerbaiyán. Karimli, con una trayectoria de más de dos décadas liderando la oposición, ha manifestado en varias ocasiones sus críticas al gobierno de Aliyev, episodio que ahora se ve agudizado por su actual situación procesal.

La intervención policial que culminó con la aprehensión de Karimli e Ibrahim ocurre en un contexto político marcado por la rivalidad entre el oficialismo y quienes lo cuestionan, reportó Qaynar Info. Organizaciones políticas rivales y entidades internacionales han observado con atención los acontecimientos, dado que el Frente Popular de Azerbaiyán juega un papel relevante en la dinámica opositora del país.

La formación política ha señalado que la situación de Karimli y de su asesor refleja el creciente endurecimiento de las instituciones frente a las voces disidentes. Según informaciones del mismo portal, la solicitud para autorizaciones judiciales orientadas a extender las detenciones obedece a una estrategia que busca debilitar a quienes encabezan la oposición.

El mismo Karimli utilizó sus redes sociales para informar sobre la duración de la prisión preventiva y denunciar lo que considera una injusticia, posicionando la narrativa del partido frente a la opinión pública y cuestionando la transparencia de las actuaciones del poder judicial y las fuerzas de seguridad, de acuerdo con Qaynar Info.

Diversos sectores internos al Frente Popular han subrayado que estas acciones ponen en riesgo la pluralidad política y la posibilidad de garantizar derechos mínimos de participación, según consigna Qaynar Info. La agrupación reiteró que mantendrán la campaña por la liberación de Karimli, mientras continúan los procedimientos judiciales y se aguarda la próxima audiencia, agendada para el mes de febrero.

Mientras tanto, la atención tanto local como internacional se centra en el desarrollo del caso, debido al impacto que los procedimientos y decisiones judiciales pueden tener en el equilibrio político nacional y en la percepción externa sobre el respeto a las garantías procesales en Azerbaiyán, según resaltó el medio Qaynar Info.