SATSE pide que el Estatuto Marco inicie el procedimiento para la jubilación anticipada del personal estatutario

El Sindicato de Enfermería (SATSE) considera "imprescindible" que el Estatuto Marco incluya una disposición que comprometa el inicio del procedimiento para el establecimiento de coeficientes reductores de la edad de jubilación del personal estatutario de los servicios de salud.

Se trata de una de las vías de actuación que está desarrollando la organización sindical, "una vez que el real decreto aprobado por el Gobierno pone serios obstáculos para que los sindicatos con representación suficiente, caso de SATSE, puedan solicitar el inicio del procedimiento establecido para que las enfermeras puede jubilarse de manera anticipada si así lo desean".

SATSE critica que este real decreto por el que se regula el procedimiento para determinar los supuestos que permitan anticipar la edad de jubilación a profesiones de naturaleza excepcionalmente penosa, peligrosa o insalubre y que acusen elevados índices de morbilidad o mortalidad, pretenda dar "exclusividad" a los llamados sindicatos más representativos. "Lo son con carácter general, pero en el ámbito sanitario son superados por sindicatos como SATSE que cuentan con la mayor representatividad", apunta.

De esta forma, afirma, se está vulnerando el derecho a la igualdad y el de libertad sindical, reconocidos en los artículos 14 y 28 de la Constitución, como ha establecido la sentencia del Tribunal Constitucional 32/1990, la cual determina que el trato distinto que se otorga a las organizaciones sindicales en función de su representatividad no está justificado salvo en lo que se refiere a la participación institucional, lo que, "en ningún caso, alcanzaría a una cuestión tan específica como la de iniciar el procedimiento para la jubilación anticipada por coeficientes reductores".

SATSE recuerda que ya planteó su rechazo a esta "vulneración de derechos constitucionales" en la última modificación efectuada en la Ley General de la Seguridad Social, y en sus alegaciones al RD aprobado ahora, pero "el Gobierno ha hecho caso omiso, mostrando, una vez más, que beneficia a determinados sindicatos en detrimento del resto de organizaciones representantes de los trabajadores", apunta.

También lamenta que la solicitud se deba hacer contando con el acuerdo del empleador o administración correspondiente. "Se trata de un obstáculo muy importante, ya que en la práctica supone otorgar derecho de veto a la parte empleadora, la cual es difícil que esté a favor de proponer la jubilación anticipada de una parte de sus empleados o funcionarios por el sobrecoste en cotizaciones sociales que supondría", añade.

COMPLEJIDAD

Otro aspecto denunciado por el sindicato del real decreto es que establece un procedimiento "muy complejo" y con muchos intervinientes que deben emitir sendos informes (Dirección General de Ordenación de la Seguridad Social, Instituto Nacional de Seguridad y Salud en el Trabajo, Inspección de Trabajo y Seguridad Social, Ministerio de Función Pública, Comisión de Evaluación).

Pese a todo ello, SATSE asegura que no va a dejar de reclamar que se regule la jubilación anticipada por coeficientes reductores para la profesión enfermera y actuará en todos los ámbitos posibles para lograrlo, ya sea de manera directa, instándolo desde el sindicato, en la negociación del Estatuto Marco o bien por vía indirecta a través de los grupos parlamentarios, ministerios implicados o cualquier otra vía posible.

Al respecto, señala que se ha abierto una vía, a través de la disposición adicional primera del RD, que establece que se constituirá un grupo de trabajo que evaluará específicamente la "dimensión de género en la fijación de coeficientes reductores en aquellas ocupaciones o actividades profesionales con mayor presencia femenina".

Es una "oportunidad muy importante" para que enfermería, que es mayoritariamente femenina, logre el acceso a la jubilación anticipada, apunta. SATSE remitió ya en 2021 un informe al Ministerio de Seguridad Social en el que fundamentaban las evidencias científicas y los estudios que avalan las "penosas condiciones" de trabajo de las enfermeras y la afectación que éstas tienen sobre su salud. Con ello, se solicitó el inicio del procedimiento para la regulación de un coeficiente reductor para estas profesionales.

"Las enfermeras sufren a diario una continua sobrecarga asistencial y unos niveles muy altos de responsabilidad y estrés que, junto con la exposición a una serie de riesgos inherentes a su trabajo (psicosociales, químicos, biológicos, ergonómicos, mecánicos), conllevan la aparición de determinadas patologías y problemas de salud que empeoran con el paso de los años", finaliza el sindicato.