Roma, 26 abr (EFE).- El Ayuntamiento de Milán (norte de Italia) puso este viernes a la venta las entradas para la exposición "Picasso, el extranjero", que se inaugurá el próximo 20 de septiembre, y lo hizo en coincidencia con el 87 aniversario del bombardeo de Guernica, la masacre de 1937 que inspiró una de las obras más reconocidas del artista.
La muestra, que podrá visitarse en el Palacio Real de Milán hasta el 2 de febrero de 2025, contará con más de 80 obras del artista, así como documentos, fotografías, cartas y videos, permitirán al visitante conocer el mundo de Pablo Picasso (1884-1973) y en particular su trayectoria estética y política en Francia, su país de acogida.
Entre las obras expuestas figuran pinturas, cerámicas, dibujos, collages o grabados procedentes del Museo Nacional Picasso-París y del Museo Nacional de Inmigración de París, ciudad en la que Picasso se instaló en 1904 y donde desarrolló gran parte de su carrera pictórica.
El perfil de Picasso "como inmigrante" en el París de los primeros compases del siglo XX y cómo ésta condición influyó en su obra y su vida personal son los ejes de esta exhibición que busca ahondar en esta faceta poco conocida de uno de los creadores del cubismo, según la organización.
"Se trata de un proyecto que abre a más reflexiones sobre los temas de la acogida, de la inmigración y de la relación con el otro", explicó en un comunicado.
En esta exposición monográfica se podrán observar además documentos inéditos descubiertos por la comisaria de la muestra, la escritora francesa Annie Cohen-Solal, procedentes del archivo de la policía de París que demuestran como el pintor estuvo sometido a vigilancia durante su estancia en la capital francesa.
"Encontré documentos, huellas dactilares y fotografías que demuestran cómo la policía consideraba a Picasso un extraterrestre y un paria", explicó Cohen-Solal en la nota.
Picasso estuvo toda su vida observado por la policía porque "no hablaba francés, se le sospechaba de anarquista porque había frecuentado a algunos catalanes y, finalmente, como artista de vanguardia, había sido rechazado por la Academia de Bellas Artes", aseveró la comisaria.
La muestra explora cómo su condición de extranjero moldeó e influyó en su identidad en un país como Francia que "ni siquiera cuando se consagró como uno de los más grandes artistas vivos de la época lo consideró un verdadero ciudadano", relató Cohen-Sohal. EFE
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