Rolls-Royce Ghost, ahora también como Black Badge

A un año de su lanzamiento, la segunda edición del Rolls-Royce Ghost vuelve como Black Badge en una variante especialmente sombría.

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HANDOUT - Los compradores pueden elegir el color negro para el Rolls-Royce Ghost Black Badge, pero también cualquiera de los 44.000 colores del abanico de pinturas de la marca de lujo, aún manteniendo los detalles oscuros. Foto: Rolls-Royce/dpa - ATENCIÓN: Sólo para uso editorial con el texto adjunto y mencionando el crédito completo
HANDOUT - Los compradores pueden elegir el color negro para el Rolls-Royce Ghost Black Badge, pero también cualquiera de los 44.000 colores del abanico de pinturas de la marca de lujo, aún manteniendo los detalles oscuros. Foto: Rolls-Royce/dpa - ATENCIÓN: Sólo para uso editorial con el texto adjunto y mencionando el crédito completo

A un año de su lanzamiento, la segunda edición del Rolls-Royce Ghost vuelve como Black Badge en una variante especialmente sombría.

El fabricante británico anunció que los precios parten de algo menos de los 360.000 euros (376.000 dólares) y que está previsto que las primeras entregas comiencen en las próximas semanas.

Por un recargo adicional de cerca del 20 por ciento sobre el Ghost normal, se puede contar con un diseño que incluye piezas de adorno fuertemente oscurecidas por dentro y por fuera. La legendaria figura Espíritu del Éxtasis, apodada Emily, que adorna el capó de los Rolls-Royce, también se ofrece en color negro plateado.

Los británicos aplican en cada vehículo casi 50 kilos de una mezcla de pintura especial, para luego iniciar un proceso de pulido de varias horas.

Sin embargo, el extra no es imprescindible para el Black Badge: el Ghost con los detalles en negro también está disponible en los otros 44.000 colores del abanico de pinturas de la marca de lujo.

La berlina de lujo del segmento F cuenta con un bloque de 12 cilindros en V de 6,75 litros. Según Rolls-Royce, su potencia se incrementó en 21 kW/29 CV hasta alcanzar los 441 kW/600 CV, y ofrece un par máximo de 900 Nm, en lugar de 850 Nm.

La nueva versión Black Badge también cuenta con un ajuste más deportivo para la caja automática de ocho velocidades con solo pulsar un botón, así como un menor recorrido del pedal de frenos.

Hasta el momento, Rolls-Royce no suministró detalles sobre el rendimiento y el consumo de combustible.

dpa