La cantante de ópera eslovaca Edita Gruberova, conocida como "reina de la coloratura" por su timbre y su agilidad vocal, falleció a los 74 años, tras medio siglo de carrera por los teatros más prestigiosos del mundo, informó el martes su agente.
Edita Gruberova, que residía en Suiza, murió el lunes en Zúrich, según el comunicado de la agencia alemana que la representaba, Hilbert Artists Management.
Esta incansable artista actuó en todo el mundo, especialmente en las óperas de Baviera, Viena, Zúrich o Barcelona, donde hizo cientos de representaciones.
Nacida en Bratislava, Edita Gruberova se formó en varias corales y en el conservatorio de la ciudad eslovaca. Luego se instaló en la capital austriaca, donde empezó realmente su carrera en 1970.
Debutó con "La flauta mágica" de Mozart, donde encarnó a la Reina de la Noche, uno de sus papeles fetiche y que interpretaría casi 70 veces en la escena del Staatsoper de Viena.
El director de este templo austriaco de la música, Bogdan Roscic, rindió homenaje a la soprano, de quien dijo que "no fue solo una leyenda, sino que dejó su huella en esta casa", según un comunicado.
"Su perfección vocal tan elogiada nunca fue un fin en sí mismo, estuvo al servicio de una devoción sin falla a la música y a la mejor interpretación posible", prosiguió.
En junio de 2018, dio un concierto de despedida en esta ópera, antes de retirarse de la escena lírica a finales 2019.
"Esta diva combativa, que no siempre facilitó el trabajo de los directores artísticos, siempre luchó para que la música y las emociones estuvieran en el primer plano", dijo de ella la adjunta de Cultura en la alcaldía de Viena, Veronica Kaup-Hasler.
"Fue una de las mejores sopranos del mundo", destacó por su parte la presidenta eslovaca, Zuzana Caputova. "Decía que su destino era servir a genios como Mozart, Bellini, Schubert o Donizetti", añadió.
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