Así se hizo "El Libro de la Selva"

El director y los protagonistas de la nueva apuesta de Disney nos traen el "detrás de escena" de la película que llega a los cines argentinos el próximo 7 de abril

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El estadounidense Jon Favreau, realizador de la saga Iron Man, se pone al frente de la nueva adaptación de los inolvidables cuentos de Rudyard Kipling, que ya tuvieran su versión animada en 1967, también con el sello de la Casa de Mickey y con la dirección de Wolfgang Reitherman.

El Libro de la Selva es protagonizada por el debutante neoyorquino Neel Sethi, quien a sus de 10 años se mete en la piel de Mowgli, el cachorro-humano que fue criado por una familia de lobos. Un elenco estelar compuesto por Scarlett Johansson, Idris Elba, Bill Murray, Lupita Nyong'o, Christopher Walken, Giancarlo Esposito, Ben Kingsley y Ralph Ineson le prestan sus voces a los animales que acompañan al protagonista en esta épica aventura de acción real en 3D.

"Mowgli descubre que ya no es bien recibido en la selva cuando el temible tigre Shere Khan (Elba), resentido por las heridas infligidas por el Hombre, promete eliminar todo lo que él ve como una posible amenaza. Forzado a abandonar el único hogar que conoció en su vida, el niño se embarca en un fascinante viaje de autodescubrimiento, guiado por la pantera mentora Bagheera (Kinglsey) y el despreocupado oso Baloo (Bill Murray)", dice la sinopsis del película.

"En el camino, Mowgli se encontrará con animales de la selva que no tienen las mejores intenciones, incluida Kaa (Johansson), una serpiente pitón cuya mirada y voz seductora lo hipnotizan, y el embaucador Rey Louie (Walken), quien intenta obligar a Mowgli a revelar el secreto de la escurridiza y mortal flor roja: el fuego", cierra el resumen del argumento de El Libro de la Selva, cuyo guión firma Justin Marks. La historia también incluye a la protectora madre loba Raksha (Nyong'o) y a Akela, el macho alfa de la manada de lobos (Esposito).

"Miedo, peligro, humor, y también emoción", dice Favreau para resumir los sentimientos que aborda su largometraje. "El Libro de la Selva combina, de un modo sorprendente, la acción real con entornos fotorrealistas y animales generados por computadora, utilizando tecnología y técnicas de narración de vanguardia para sumergir a los espectadores en un mundo exuberante y cautivador", asegura Disney.