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Este martes se pone en marcha la Agencia Técnica de Investigación Criminal (ATIC) con el objetivo de brindar apoyo al fiscal que dirige las investigaciones de los delitos más difíciles.
Los 97 agentes de la ATIC -39 mujeres y 58 varones- que este martes salen a las calles, cuentan con técnicas y procedimientos de investigación que les permitirá encontrar en los pequeños detalles el hilo que los llevará al descubrimiento, a la explicación y a la prueba de los delitos, así como a la comprobación de los autores.
De acuerdo con lo que publica La Prensa, las expectativas con la ATIC son grandes, manifestó el director de fiscales, Rolando Argueta, quien será el encargado de decidir qué caso investigará la nueva fuerza y cuál le corresponderá a la Dirección Nacional de Investigación Criminal (DNIC).
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"Los agentes serán distribuidos en Tegucigalpa y San Pedro Sula. Esto es consecuencia de un proceso más o menos largo de selección de los agentes llevado a cabo en 2014. De todos los aspirantes a agentes, que fueron más de 2.000, se preseleccionaron 300 y al final quedaron 100", comentó Argueta.
Auxiliados por la ley y también por las ciencias forenses, estos investigadores tienen la difícil tarea de cambiar la imagen de una policía de investigación que en 1995 nació con grandes expectativas, pero que a partir de 2001 comenzó a deteriorarse y contaminarse.
Según consigna El Heraldo, actualmente, la percepción es que la sociedad hondureña ya no quiere más gente uniformada y empistolada, sino que claman por investigadores sigilosos, que con sus pericias puedan descubrir lo más pronto posible si se cometió un delito, cómo se realizó y quién lo ejecutó.
En total, serán 97 los agentes de la ATIC que trabajarán en las calles
El mismo periódico agrega que, utilizando técnicas y equipo de última generación, los técnicos graficarán y analizarán la escena de un hecho delictivo o criminal y, aplicando la cadena de custodia (fijación, recolección, levantamiento y embalaje), trasladarán las evidencias a los laboratorios del Ministerio Público, donde se analizarán para determinar si puede servir como prueba ante un tribunal de Justicia.
Todos los agentes tienen conocimientos generales sobre aspectos forenses y criminalísticos, como balística, documentología, huellas, dactiloscopía, toxicología, pero un grupo de ellos se especializó sobre el tema.