"Es urgente la necesidad de la paz". Así se refirió el Papa Francisco sobre el conflicto entre Israel y Palestina, frente al presidente israelí Shimon Peres y el primer ministro Benjamin Netanyahu, en su llegada a Tel Aviv.
Tal como pronunció durante su gira de este fin de semana por Tierra Santa, el Sumo Pontífice invitó a Peres y Mahmoud Abbas a dialogar en el Vaticano para encontrar una solución al conflicto. "Invito a Israel y a Palestina a dialogar por la paz", expresó.
"Construir la paz es difícil, pero vivir sin paz es un tormento", agregó Francisco, quien solicitó a los mandatarios de ambos territorios que "sean portadores de esperanza".
El Papa aterrizó esta tarde en el aeropuerto internacional Ben Gurión, a las afueras de Tel Aviv, para la tercera etapa de su visita a Tierra Santa, tras la misa celebrada en Belén.
Francisco llegó en un helicóptero de la Fuerza Aérea jordana procedente de la ciudad palestina de Belén, donde este domingo se reunió con el presidente Mahmud Abbas y ofició una misa ante unos ocho mil creyentes en la Plaza del Pesebre.
En la pista del aeropuerto, Francisco fue recibido por el presidente de Israel, Shimon Peres, y por el primer ministro, Benjamin Netanyahu, entre otros dirigentes de los tres poderes, del Ejército y de las fuerzas de seguridad, según marca el protocolo local.
Francisco dividirá su estancia de apenas 24 horas en Jerusalén entre el diálogo ecuménico con la Iglesia ortodoxa, el peregrinaje a los lugares santos, y una visita a las autoridades israelíes.
Tras la bienvenida oficial en Tel Aviv, a la que debió desplazarse por motivos políticos a pesar de encontrarse antes en Belén, a sólo 8 kilómetros de Jerusalén, el papa celebrará un encuentro con el patriarca ecuménico de Constantinopla,