El cierre del gobierno de EEUU tiene un recordado antecedente durante la gestión de Bill Clinton, que registró el período más largo de ishutdown/i de la historia, cuando la Administración demócrata vivió 21 días de parálisis en todas las dependencias públicas.
Durante aquel cierre del Gobierno, se gestó una historia mundialmente famosa: la relación entre el presidente Bill Clinton y la becaria Mónica Lewinsky.
¿Cómo fueron los hechos?
En julio de 1995, Mónica Lewinsky empezó a trabajar como becaria en la oficina del jefe de personal de la Casa Blanca.
El 13 de noviembre, la becaria pasó a la oficina de asuntos legislativos de la Casa Blanca. Un día después, el Gobierno suspendió sus actividades por la falta de acuerdos entre la Administración Clinton y los republicanos en el Congreso.
El 15 de noviembre, con la mayoría del personal licenciado por el shutdown, el presidente Clinton asistió a una celebración de cumpleaños para saludar al jefe de personal de la Casa Blanca. En ese lugar, Mónica Lewinsky "se levanta la camisa" para mostrar su ropa interior al presidente de los EEUU, según publicó The Washington Post, cuando el escándalo estalló.
Clinton invitó a Lewinsky a visitar su estudio privado, donde mantiene el primer encuentro sexual, según la cronología publicada durante el proceso de impeachment que se impulsó contra el presidente demócrata.
El escándalo que casi termina con la presidencia de Clinton surgió a partir de las confesiones que Lewinsky le hizo a una compañera de trabajo, Linda Tripp, que grabó las conversaciones telefónicas con la becaria y se las entregó al fiscal Kenneth Starr, quien hizo público el escándalo que durante meses fue tema central de los medios internacionales.